Vender en Francia, Alemania e Italia le cuesta a cada pyme 90.000 euros, pese al mercado único europeo
Amazon ha presentado, en colaboración con CEPYME, un estudio que muestra las principales barreras a la exportación para las pequeñas y medianas empresas españolas. Según explicaron, adaptarse a las certificaciones nacionales supone un importante sobrecoste para los negocios cuando venden en países europeos.
Vender fuera de España es una opción cada vez más importante para los autónomos y negocios. Sin embargo, pese a que la Unión Europea es su principal mercado exterior, las pymes siguen encontrándose con serias barreras que dificultan su acceso a terceros países europeos, a pesar de la existencia del mercado único. En concreto, según los datos de Amazon, las diferentes certificaciones -que nacen de las mismas directivas europeas- pueden suponer que un negocio español deba pagar 90.000 euros sólo para poder vender en Alemania, Francia e Italia.
Así lo denunciaron desde la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME) y la multinacional de comercio electrónico Amazon, en el marco de la presentación de un estudio en el que se muestran las principales dificultades de las pymes cuando comienzan a exportar los países vecinos. Por ejemplo, las diferentes normativas y las certificaciones que tienen que obtener para vender otros países.
También en materia de impuestos como el IVA, el cual, pese a estar armonizado en toda la Unión Europea, presenta diferentes particularidades en cada país, lo que genera incertidumbre y costes administrativos para los negocios españoles. Además, por supuesto, de aumentar la probabilidad de cometer errores en las declaraciones de impuestos que generen sanciones o recargos.
Ante esta situación, CEPYME y Amazon recalcaron la necesidad de hacer efectiva la idea de mercado único en la Unión Europea (UE). En este sentido, Francisco Vidal, director de Economía y Políticas Sectoriales de la confederación, afirmó que en la actualidad “tenemos un mercado sin aranceles, pero no único.”
Las pymes deben obtener certificaciones específicas para vender en los países de la UE
La principal barrera que encuentran las pequeñas y medianas empresas españolas que exportan a terceros países es, según el estudio, las diferencias normativas con las que éstos transponen las Directivas europeas, adaptándolas a sus mercados. Así, el 71% de las pymes consideran que este factor aumenta sus costes, y el 66% afirmó obtener menores beneficios por esta causa.
En este sentido, Christoph Steck, director de Políticas Públicas de Amazon en España, cifró en 90.000 euros el coste que supone para una pyme española obtener las certificaciones nacionales necesarias para poder vender sólo en Alemania, Italia y Francia. Estos costes se incrementarían a media que lo haga el mercado potencial del negocio, a pesar de que todos los requisitos beban de la misma Directiva europea.
Así lo confirmó Carlos Gutiérrez, director general de AIS Building Outnovation, una de las pymes que se dedican a la exportación de productos desde España a otros países de la UE, quien explicó que los negocios tienen “que hacer el proceso en cada sitio, a pesar de que las certificaciones exigidas son casi las mismas. Por tanto, las pequeñas y medianas empresas tenemos que hacer una doble inversión en certificación.”
En este contexto, desde CEPYME y Amazon pusieron de manifiesto la importancia de que la idea de mercado único que rige la Unión Europea sea realmente efectiva. Según argumentaron, es una cuestión imprescindible para el tejido empresarial español, ya que “mercados pequeños hacen empresas pequeñas”, como afirmó Luis Aribayos, secretario general de la confederación.
Los impuestos son otra de las trabas que encuentran las pymes cuando exportan a la UE
En paralelo, el estudio de Amazon puso de manifiesto cómo las diferentes políticas tributarias entre los países miembros, especialmente alrededor del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) es otra de las trabas que las pymes españolas identifican como dificultades cuando exportan a países europeos.
Se trata de una cuestión llamativa, teniendo en cuenta que el IVA está armonizado en toda la UE, aunque se aplica de forma diferente en algunas deducciones. Además, “la ventanilla única europea no cubre todas las transacciones comerciales”, por lo que los autónomos y pequeños negocios deben hacer frente al sobrecoste que supone adaptar su fiscalidad a cada mercado.
En este sentido, pusieron como ejemplo el caso de Segeda, una pyme española dedicada a la fabricación de maquinaria, cuyos ingresos dependen en un 40% de las exportaciones a países como Italia, Portugal y Francia. Sobre este asunto, su CEO, Javier Barrena, afirmó que “las tasas impositivas en diferentes países afectan a la capacidad de deducción y la cantidad que se puede reducir en cada mercado, generando incertidumbre y costes administrativos a las empresas.”
CEPYME y Amazon destacan la importancia del mercado único europeo para las pymes españolas
A tenor de los datos recogidos por el estudio, desde CEPYME y Amazon incidieron en la necesidad de aplicar de forma efectiva la idea de mercado único en la Unión Europea. Según argumentaron, en la actualidad se trata de un mercado sin aranceles, pero no un mercado único en la práctica, como demuestran las principales barreras que identifican los negocios exportadores.
Todo, a pesar de su creciente importancia en la economía española. Después de un año en el que las ventas exteriores han sostenido a miles de pequeños negocios, acercarse a este objetivo es cada vez más importante. Más aún, teniendo en cuenta que el 44% de las exportaciones españolas son realizadas por pymes, y que el 65% de éstas tienen como destino terceros países de la Unión Europea.
Además, la implementación de la tecnología ha permitido que, en este momento, una de cada cuatro pymes españolas exporte a través de Internet, frente al 18% de la media europea. En este sentido, desde Amazon destacaron que 125.000 pequeñas y medianas empresas de la UE venden a través de su plataforma, de las cuales el 50% realiza exportaciones. Además, el 60% de los vendedores en el gigante del comercio electrónico son autónomos o pequeños y medianos negocios.
Ante esta tendencia, Chritoph Steck identificó como principales retos “la educación y el conocimiento, por parte de los emprendedores, para implementar en sus negocios estrategias de venta online” y superar la barrera de “ofrecer a los clientes extranjeros un servicio al cliente que les dé confianza para seguir comprando desde fuera de España”, concluyó.
