En qué sectores se concentran. Muchas microempresas no quieren admitir su mala situación

En España hay 40.000 pequeños negocios 'zombi' o no rentables: consejos de los expertos para reflotarlos

En nuestro país hay casi 50.000 negocios zombis, un 83% de ellas son microempresas cuyos ingresos no son suficientes para cubrir sus gastos. Los expertos señalan en qué sectores se concentran más y algunas vías para retomar la senda de la rentabilidad.

Así podrían resucitar los 40.000 pequeños negocios zombi que hay en España.
Así podrían resucitar los 40.000 pequeños negocios zombi que hay en España.
En España hay 40.000 pequeños negocios 'zombi' o no rentables: consejos de los expertos para reflotarlos

Según Informa D&B, existen cerca de 50.000 empresas zombi en España; la mayoría de ellas micropymes. Con una particularidad: su número no deja de crecer, pues hay un 21,5% de negocios en estado catatónico más que hace apenas un par de años. En concreto, la filial de Cesce ha detectado 48.049 empresas zombi en 2023, 8.489 más que hace apenas dos años, cuando se contabilizaron 39.560 compañías en tal situación. Esta cantidad representa nada menos que un 3,7% del total de sociedades activas en su base de datos.

Y cuando Informa D&B califica una pyme como zombi, en realidad la encuadra en la categoría de negocio con al menos 10 años de antigüedad y cuyo rendimiento económico no es suficiente para cubrir sus gastos financieros. En concreto, con una ratio de cobertura de intereses inferior a 1 durante los dos últimos años: 2022 y 2023.

El análisis de esta categoría de empresas resulta interesante, puesto que estos negocios presentan tantas fragilidades que las pueden llevar al cese de actividad que el nombre de zombi les viene como anillo al dedo. Hasta el punto de que hay expertos que califican su existencia de fuente de preocupación, porque no son eficientes; y mantenerlas en actividad a través de préstamos bancarios o de ayudas públicas afecta a la marcha general de la economía española.

Para Emilio J. Díaz, fundador y socio de Estrategízate, hay al menos tres obstáculos a los que se enfrentan los pequeños negocios al intentar identificar si son empresas zombis, como paso previo a decidir si echar el cierre o intentan “volver a la vida”. “El primero es que muchas pymes ni siquiera se plantean que son zombis. Sumidas en su día a día, en la pérdida de cuota de mercado y rentabilidad, no se paran a pensar de manera más profunda en lo que realmente está sucediendo”. Luego aparece la falta de una metodología para hacerlo, según este experto: “Saben que no están en el buen camino, pero no cómo realizar un análisis más profundo y detallado que les ayude a tomar decisiones”. Y finalmente está el miedo al cambio. “Paradójicamente, cambiar de manera radical les aterra, porque les aleja de lo que han hecho durante toda su trayectoria, por mediocre que sea esta”.

El procedimiento para llevar a cabo el cierre de un negocio depende, sobre todo, de si tiene o no deudas

Al analizar los datos, el tamaño es un factor muy relevante. No en vano, 39.990 de las organizaciones que se encuentran este estado (83,2%) son microempresas. Otro aspecto relevante es su actividad. La construcción y las actividades inmobiliarias cuentan con más pymes en estas circunstancias, con 13.688 negocios, un 28,5% del total. Después se sitúa el comercio, con 9.783 en negocios en tales circunstancias, un 20,4% del total registrado. En el comercio al por mayor se encuadran 4.065 pymes zombis (8,5%), mientras que en el comercio al por menor hay 3.785 sociedades (7,9%) y 1.933 compañías dedicadas a la venta y reparación de vehículos de motor (4%). El tercer sector más afectado por la presencia de empresas zombis es el de servicios empresariales, con 6.632 compañías en dicha situación (13,8%).

Por otro lado, Informa D&B destaca que la hostelería es el sector cuya tasa de zombis supera de manera más significativa a la del grupo de control. De este modo, las 3.619 compañías en este estado que se registran en la hostelería representan un 7,5% de las empresas zombis, mientras que las 30.208 compañías del grupo de control suponen un 5,4%.

“El cierre nunca ha de ser el objetivo”, explicó Emilio J. Díaz, “pero si analizadas todas las opciones no hay una salida mejor, hay que hacer las cosas de forma ordenada, cumpliendo con los compromisos y siguiendo los pasos marcados por la ley. De ese modo se conserva marca personal y puede ser el primer gran paso para otros futuros proyectos”. Aprovechando de este modo la legislación especial para micropymes y la Ley de Segunda Oportunidad.

El procedimiento para llevar a cabo el cierre de un negocio depende, sobre todo, de si tiene o no deudas. Los pagos pendientes son una de las mayores trabas que tienen que sortear los autónomos a la hora de finalizar su actividad. El procedimiento para cerrar un negocio es sencillo cuando no hay deudas acumuladas: basta con liquidar la compañía. Es decir, terminar de realizar los pagos que hay pendientes y proceder a darse de baja en la Seguridad Social o, en el caso de ser una sociedad, realizar una disolución mercantil. “En este último caso, los autónomos societarios están obligados a realizar una escritura de disolución de la empresa”, indicó el experto.

Por el contrario, en el momento en el que existen deudas sólo hay un procedimiento que el autónomo pueda hacer de manera legal para cerrar bien su negocio, y es abrir un concurso de acreedores, que permite llegar a un acuerdo con estos, lo que posibilita en muchos casos una reducción de la deuda. Además, los trabajadores por cuenta propia se libran a través de un concurso de tener que decidir a quién pagar primero y cuánto abonar, pues es la administración concursal la que interviene y establece cómo se va a proceder a la devolución de las cuantías insatisfechas.

Es posible volver a la vida: el 47,7% de los 47.350 negocios contabilizados como zombis en 2022 ha mejorado su situación durante 2023

Sin embargo, estas empresas zombis pueden volver a la vida. Informa D&B ha hecho un seguimiento de las compañías que identificó el año pasado en este estado y ha podido comprobar que el 47,7% de los 47.350 negocios contabilizados en 2022 ha mejorado su situación durante 2023. “Muchas empresas zombi pueden tener futuro. Un futuro distinto, pero sustentado en años de experiencia. El cierre solo es la mejor opción cuando se llega demasiado tarde”, argumentó el fundador y socio de Estrategízate.

Para aquellos negocios que sigan adelante, este experto recomienda “analizar al detalle el perfil de los clientes que ya nos compran. Ese es siempre el primer paso. A partir de ahí vienen dos más, por pura lógica: buscar clientes similares a los que nos compran de manera rentable y dejar de invertir recursos en los perfiles que están muy lejos de nuestras posibilidades”. Todo ello tiene que ver con tener muy claro el porqué de la presencia del negocio en el mercado. “¿Qué aportamos? Es la gran pregunta. Y para descubrirlo debemos llevar a cabo un profundo análisis interno, combinado con entrevistas, reuniones grupales y/o encuestas donde recibir las valoraciones de los propios clientes”.

De hecho, este especialista menciona que las empresas en estado zombi carecen a menudo de un propósito claro y unos valores diferenciales. “Muchas empresas consideran que dirigirse a muchos clientes es lo mejor, porque les amplía el mercado potencial. La realidad es que hace mucho más difícil la actividad. Un almacén mayorista de material de fontanería puede dejar de ser “generalista” y pasar a ser un especialista en “tratamiento de agua”, por ejemplo. Su propósito puede ser convertirse en el especialista zonal y ser así reconocido por el conjunto de instaladores de su zona”, continuó Emilio J. Díaz. Este nuevo posicionamiento le llevará a planificar de nuevo su surtido, las marcas que comercializa, los niveles de almacenaje, la formación y perfil de sus empleados… en general su propuesta de valor para ofrecerles un nivel de atención a un conjunto concreto de instaladores que nadie más pueda ofrecer”.

Cualquier empresa que está compitiendo vía precio, trabajando con muchas marcas y sin ofrecer ningún servicio significativamente distinto, puede concentrarse en algunas (las más estratégicas por su rentabilidad y futuro) y buscar a partir de ahí la diferenciación, ofreciendo el mejor servicio de entrega, realizando promociones específicas, haciendo talleres formativos con sus clientes o destacándolas en una propuesta online atractiva, por ejemplo.

“Llevándolo a aspectos generales entendibles por todos, podemos tener una peluquería de caballeros o una barbería especializada en los cortes más actuales, una orientada a moteros o especializarnos en los niños. En cada caso, nuestro propósito y nuestra propuesta será completamente diferente”, concluyó el experto de Estrategízate: “Todo se resume en tener muy claro cuál es nuestro cliente y los elementos de nuestra propuesta que nos van a diferenciar significativamente de la competencia”.