Elegir el mejor local comercial: veinte consejos de los arquitectos para que los autónomos tengan éxito

“En muchas ocasiones, cuando un autónomo compra o alquila un local no siempre responde a las necesidades de la idea de negocio que tiene”, explican expertos en conectar propietarios de locales comerciales con emprendedores. Para aquellos autónomos que están pensando en comprar o alquilar un local, y poner en marcha su negocio, dos de arquitectos que trabajan en Localia, Laura Andreu y Simone Cammillett, ofrecen 20 consejos para montar con éxito un negocio de proximidad.

1. Escoger una buena ubicación.

El barrio en el que se ubique el negocio será esencial y hay que preguntarse lo siguiente: ¿es necesario tu negocio en el barrio? ¿Hay mercado? Porque muchas veces se piensa que en ciertos barrios el negocio va a resultar un éxito asegurado, pero quizá no existe mercado para lo que se va a ofrecer. Al revés, puede que el barrio esté saturado.

2. Estudiar por qué vía acudirán los clientes.

Hay que valorar de manera detallada cómo es el recorrido de las personas que pasan por esa calle donde quedará ubicado el local. Y, aunque montar un negocio al lado de otro similar parece una mala idea, ambos pueden llegar a ser grandes aliados. Algo a tener en cuenta son las zonas “de bares”, a menudo por zonas concentradas de la ciudad; si se consigue abrir en una de esas zonas con concurrencia, seguramente los clientes caerán solos.

3. Analizar la competencia.

Hay que fijarse en los negocios que hay alrededor y preguntarse qué les funciona. Estudiar a la competencia, aunque estén en otras partes de la ciudad. No se trata de copiar a nadie, sino encontrar aquello que hace único un negocio para ser reconocido y reconocible.

4. Verificar el tamaño del local.

Los locales se suelen mostrar vacíos, o con mobiliario del antiguo dueño que habrá que cambiar. En estos casos puede que el espacio parezca más pequeño de lo que realmente es. Lo importante son los metros útiles. Una buena planificación y distribución del espacio pueden cambian la percepción por completo.

5. Pensar en un target concreto.

Después de todo, los productos o servicios que se ofrezcan no estarán dirigidos a todo el mundo, sino que se centrarán en un grupo de personas concretas con necesidades concretas. Por ello, hay que tener muy claro cuál es será el target (público objetivo) en el que se van a centrar las iniciativas, para así obtener una mayor rentabilidad de la inversión que se realice.

6. Definir el producto.

Hay que pensar bien lo que se va a ofrecer y ponerle un precio. Y, aunque se tenga la intención de ofrecer el producto a un precio asequible, siempre hay que intentar  diferenciarse por algo que se ofrezca.

7. Reflexionar sobre el horario ideal.

El horario de apertura de un negocio dependerá de los productos o servicios que ofrezca y de su ubicación. Un ejemplo sencillo: si se va a abrir un negocio en una calle llena de oficinas, ¿qué funcionaría mejor, un negocio diurno o uno nocturno?

8. Tener en cuenta el aforo permitido y las obras a realizar.

Si es un local "en bruto" serán mayores los costes iniciales, ya que habrá que construir todo casi de cero. Para el local que necesita ser transformado es importante reparar  techos, paredes y suelos. Hay que contemplar las salidas de humos, si fuese necesario, o las salidas de emergencia.También puede existir la necesidad de incorporar un sistema de climatización, de frío y/o de calor. Todo esto repercutirá bastante en la inversión.

Y en cuanto al aforo, aquí van unos ejemplos. Para una zona de bar, en la que el cliente está de pie, que tiene 16 metros cuadrados se contemplaría un metro cuadrado por persona. Para un comedor, donde el cliente está sentado, de 20 metros cuadrados habría que conceder un metro y medio cuadrado por persona. Y tener en cuenta los metros de los aseos, incluidos los de minusválidos, etc.

9. El horario ideal.

Para ello hay que tener en cuenta la actividad que se va a desarrollar; "la vida" de la zona y del barrio; donde estará ubicado el local; los clientes; los negocios que hay alrededor, etc.

10. Informarse sobre las licencias necesarias.

Es bastante posible que haya que contratar a profesionales que ayuden en la gestión. Los costes de licencias y tramitaciones técnicas suelen oscilar entre los 1.500 euros (si es sencilla) y los 3.000 (si es compleja). Además, hay que tener en cuenta que para agilizar los trámites en comunidades autónomas como la de Madrid, es recomendable llevarlo a cabo a través de una Entidad Colaboradora Urbanística (ECU), empresa homologada por el ayuntamiento de Madrid.

11. Hacer una lista de la maquinaria que se va a a necesitar.

Hay que pensar en la maquinaria especializada que se va a necesitar, ya que suele suponer un porcentaje importante del presupuesto. Esto puede depender de muchos factores, por ejemplo, si se pueden reutilizar elementos del local, tratar de ahorrar comprando maquinaria de segunda mano. Es recomendable reservar entre un 20% y 40% del total del presupuesto para mobiliario, complementos y decoración; y podría ser, incluso, mayor según cada caso.

12. Escoger buenos proveedores.

La calidad del producto que se ofrezca es vital. Es bueno recordar estas dos recomendaciones: elegir siempre una infraestructura adecuada a las necesidades y escoger los mejores proveedores. Y ello, junto con un buen diseño, pues así se conseguirá que los clientes recuerden el negocio por un servicio excepcional.

13. Calcular el retorno de la inversión.

Hacer una estimación realista de los costes para la puesta en marcha y contemplar todos los gastos de la la inversión que se va a realizar A parte de la inversión para el local, ya han quedado mencionados en líneas anteriores otros conceptos, a los que hay que sumar los sueldos de los empleados, etc. Los locales que han conseguido un mejor diseño se pueden permitir ofrecer sus productos más caros y la satisfacción del cliente es mayor.

14. Pensar en un concepto diferente.

Como en todos los proyectos que se plantean, hay que pensar en una idea con fuerza. Esto hará que las decisiones sean más fáciles. Cuando la idea está trabajada, se ofrece algo más que un producto,es decir, una experiencia para el cliente. Tener un concepto claro para el negocio ayudará a triunfar.

15. Crear una experiencia.

Para que el negocio sea recordado y logre fidelizar y atraer clientes, es más que recomendable crear una experiencia única: que el usuario se sienta atraído y entusiasmado por el producto o servicio que se ofrece. Por ello, habrá que pensar en todo su proceso de compra, desde que entra en el establecimiento hasta que se produce la venta. La atmósfera del local es un elemento clave, tener un espacio de negocio que emocione y enamore al cliente es fundamental.

16. Diseñar una imagen única.

Crear coherencia en la comunicación gráfica de la marca es esencial. El diseño de los letreros dónde muestres los precios, el material de los packagings, el tamaño de la cartelería, etc. no suele ser trabajo de fácil resolución. Disponer de un diseñador gráfico es clave, pues no solamente se ocupará de la creación de un logo que hable de tu concepto, sino que también dará apoyo en todas la cuestiones relacionadas con la difusión y la imagen.

17. Elegir profesionales adecuados.

¿Para la puesta en marcha de un negocio es necesario contratar a un profesional que supervise las obras de reforma o es mejor ahorrase algo ocupándote tu mismo? Aquí no hay que jugársela, si se desea que los tiempos de ejecución sean respetados y que se controlen los costes de la reforma. Colaborará en el proceso de diseño y puesta en marcha del local y ahorrará tiempo y preocupaciones.

18. Saber ser un estratega del marketing.

El marketing de todo negocio empieza por tener un espacio que atraiga a sus clientes potenciales. Una buena estrategia de marketing ayudará a que más personas visiten el local y reconozcan la marca.

19. Crear comunidad.

Hoy más que nunca es importante conectar con los clientes.Hablamos de comunicarse con ellos por un canal más allá del establecimiento. Por ejemplo, se puede pedir a los clientes que compartan imágenes en las redes sociales disfrutando de un producto o servicio, es bueno aportarles información de valor, ir más allá de la simple venta tradicional y crear una conexión con ellos y un vínculo como marca.

20. Darle vida a la marca.

No hay que descuidar la importancia de la marca en el espacio: los colores corporativos y el grafismo tienen que ser elementos de referencia. El local tiene que estar impregnado de la esencia de la marca. Es un factor importante que no pasa desapercibido a los ojos de los clientes.

Desde Localia resumen, de alguna manera, las preocupaciones que encuentra un autónomo a la hora de pensar en montar un negocio y que abordan desde su grupo: "los emprendedores ya tienen un panorama bastante difícil en este país como para abordar sus aventuras solos, por eso hay que ofrecerles todos los servicios: encontrar el local idóneo para su negocio, facilitar un estudio de arquitectura que aborde la problemática de licencias y reformas de locales y, finalmente, ayudar a dichos emprendedores a que gracias al marketing sean reconocidos y recordados los negocios de los proyectos que llevamos a cabo". Lo que requiere y necesita un emprendedor, un autónomo que desea poner en marcha un negocio es gestionarlo de manera global y centralizada; son muchos pasos los que hay que dar y con un servicio integral se gana tiempo y salud.