Cuando se utilizan en puestos que deberían ser indefinidos

La Inspección dice que vigila a 14.600 autónomos por sospechar un mal uso del contrato fijo discontinuo

La Inspección de Trabajo está vigilando a 14.600 negocios sospechosos de estar utilizando contratos fijo-discontinuos en vez de indefinidos ordinarios.

 

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La Inspección dice que vigila a 14.600 autónomos por sospechar un mal uso del contrato fijo discontinuo
La Inspección dice que vigila a 14.600 autónomos por sospechar un mal uso del contrato fijo discontinuo

La Inspección de Trabajo está poniendo más el foco en los últimos meses en aquellos negocios que hacen un mal uso del contrato fijo discontinuo que, como ya avanzaron distintos expertos laboralistas a este diario, está siendo la modalidad 'estrella'  tras los cambios introducidos en la reforma laboral. Estas modificaciones ampliaron los supuestos para suscribir este formato y recortaron las opciones de contratación temporal disponibles para los empleadores.

A finales de mayo, la Inspección de Trabajo y Seguridad Social puso en marcha una campaña específica para vigilar que los autónomos y empresas con empleados utilicen de forma adecuada el contrato fijo-discontinuo, ante el repunte en el uso de esta modalidad que ya se esperaba en esas fechas. Hasta el momento, las actuaciones de los inspectores se habían centrado en los contratos temporales fraudulentos, " así como en los celebrados a tiempo parcial que encubren jornadas de trabajo superiores a las pactadas", según explicó el Gobierno en respuesta a una pregunta parlamentaria del senador  del PSOE Miguel Ángel Heredia

Ahora, según confirma el Ejecutivo en su respuesta, "se han intensificado de manera decidida las actuaciones dirigidas a vigilar que los contratos fijos discontinuos respondan a su normativa específica, vigilando que no encubran relaciones laborales que respondan a contratos indefinidos ordinarios". Tanto es así que el pasado mayo, los inspectores enviaron nada menos que 83.619 cartas a negocios por indicios de que estaban haciendo un mal uso de cualquier tipo de contrato.  De ellos,14.601 correspondían a supuestos de posibles incumplimientos en materia de contratación de fijos discontinuos, según los datos del Gobierno.

La vigilancia de estos negocios sospechosos de hacer un mal uso de esta modalidad de contratación se hace en dos fases: en primer lugar se envían cartas de aviso a los negocios para que corrijan su situación y transformen a indefinidos estos contratos. Si no lo hacen, los inspectores procederían a visitar la actividad para comprobar si realmente existe un fraude y se están cubriendo necesidades estructurales de la empresa con esta modalidad, donde sale más barato el despido y los negocios podrían ahorrarse además el pago de cotizaciones y salario en algunos meses en los que el empleado no trabaja.

¿Cuándo considera la Inspección que se hace un mal uso del contrato fijo-discontinuo?

Según explicó en anteriores declaraciones a este diario Luis San José, abogado laboralista de AGM abogados, con la reforma laboral, el Gobierno limitó las causas de los contratos de duración temporal, regulando y potenciando el contrato fijo discontinuo “con el objetivo de convertirlo en el contrato modelo para todas las actividades de temporada y de naturaleza estacional, así como para la prestación de servicios en las contratas y subcontratas".

Sin embargo, la Inspección de Trabajo sospecha que se podrían haber cometido posibles fraudes en la celebración de este tipo de contratos. Dicho fraude se daría al utilizar el contrato fijo discontinuo en situaciones en las que debería utilizarse el contrato indefinido. Esta sería la principal causa por la que el Gobierno habría empezado esta nueva campaña de vigilancia. Cualquier irregularidad en la celebración de este tipo de contrato puede suponer sanciones de hasta 10.000 euros por contrato

Tal y como explicó el abogado laboralista Luis San José, tras la Reforma Laboral, para poder utilizar el único contrato temporal que permanece en nuestra legislación, el de circunstancias de la producción, tienen que darse causas “muy justificadas”, por lo que la mayoría de los contratos que eran por obra y servicio, debían pasar a fijos discontinuos.

Sin embargo, el fijo discontinuo "tiene que ir siempre dirigido a satisfacer el incremento temporal o excepcional del volumen de trabajo que no puede ser cubierto con la plantilla fija. Todo contrato que no sirva para esto, es probable que pueda ser calificado como fraudulento, y es posible que las campañas de inspección se centren todavía más que antes en sancionar esto", explicó Luis San José.

Por otra parte, y como los expertos vaticinaban que iba a ocurrir, se están firmando contrato fijos discontinuos en casos en los que se deberían haber firmado contratos indefinidos. De hecho, según los expertos, se trataría de uno de los fraudes más comunes. 

Para el Ministerio de Trabajo, los contratos fijos discontinuos son indefinidos, pero tienen una serie de características especiales. La más destacada es que este contrato se dirige a aquellos empleados que llevan a cabo una actividad laboral de forma intermitente (en determinadas épocas del año), pero de forma repetida cada año. Estos empleados no pierden su antigüedad y durante los meses de parón pueden solicitar la prestación por desempleo.

Si, por ejemplo, el empleado no se requiere siempre en las mismas épocas y sus descansos se cambian constantemente, esta modalidad podría estar encubriendo un contrato fijo. O, si el empleado está la práctica totalidad del año trabajando y sólo un mes de 'parón', podría estar encubriendo también un contrato indefinido, donde el despido es más caro y hay que pagar salario y cotizaciones durante todo el año. 

Además, Trabajo también ha detectado este fraude a la inversa, es decir, empresas que están haciendo uso del contrato temporal en lugar del contrato fijo discontinuo. 

La Inspección vigila en dos fases a los negocios sospechosos de fraude en contratos fijos discontinuos

Según explicó el Gobierno a través de su respuesta parlamentaria, este plan de choque contra el mal uso del contrato fijo-discontinuo se estaría estructurando en dos fases: "la primera de ellas consistiría en el envío masivo de cartas a empresas en las que se detectan, a través de la Herramienta de Lucha contra el Fraude, indicios de uso irregular de esta modalidad contractual, y a las que se les da un mes para regularizar la posible situación irregular (fase en la que se está a fecha actual)".

Una vez haya transcurrido este plazo, mediante una segunda fase, los inspectores pondrían en marcha actuaciones que pasarían por la visita al local "en aquellos supuestos en los que no se ha procedido a la transformación del contrato", añadieron desde el Ejecutivo.