Los asesores fiscales estiman que el negocio tendrá un plazo de días para mandar el recibo

Los autónomos deberán ser ellos quienes envíen las facturas electrónicas a Hacienda y no sus gestores

La Asociación Española de Asesores Fiscales y Gestores Tributarios aclaró importantes dudas que presentan los autónomos acerca de las obligaciones derivadas de la factura electrónica. 
Los autónomos deberán ser ellos quienes envíen las facturas electrónicas a Hacienda y no sus gestores

Hace unos días, este medio se hizo eco de cómo Hacienda va a tratar de combatir el fraude fiscal a través de la factura electrónica. Aunque el cruce entre facturas será una clave, según Hacienda, para aumentar la transparencia y combatir la morosidad que los autónomos están padeciendo, aún no existe un reglamento específico sobre cómo se va a implementar y han surgido diferentes dudas en el colectivo. Una de las cuestiones importantes se refiere a si eran los gestores los que se encargarán de introducir los datos de cada factura con acceso a la información bancaria del autónomo para poder automatizar el proceso. El vicepresidente segundo de la Asociación Española de Asesores Fiscales y Gestores Tributarios, Eduardo Estrade, aclaró a este medio que “serán los usuarios de las facturas electrónicas quienes deberán  introducir los datos”. Es decir, los autónomos deberán emitir electrónicamente cada factura y no podrán delegar estas operaciones a sus gestores o a sus asesores.  

Según declararon desde ASEFIGET, “que sea una labor de los autónomos es lo esperable” ya que “los asesores desconocen acerca de sus productos o servicios y de sus precios”, y añadieron que “lo idóneo es que cada actividad facture por sí misma, aunque que luego remitan las facturas a la asesoría”. Además, barajó la posibilidad de que “los asesores dispongan de un programa de enlace con los clientes, para que tengan esa factura en tiempo real y puedan enviarla a la Agencia Tributaria”. Además, valoró, en lo referente a los estados de la factura, que se dé un margen de días "como ya se viene haciendo en el Sistema de Información Inmediata de las empresas"

De esta forma, que desde ASEFIGET sopesan como la más previsible, se producirán los pasos previos a la remisión de la factura, que irá a un repositorio universal digital a nombre de cada autónomo y negocio. A través de este repositorio se producirá el cruce entre facturas emitidas y recibidas para lograr transparencia, si bien Estrade afirmó que “implementar la factura electrónica va a ser más complicado cuanto más pequeña sea la empresa” debido a que “va a cambiar la forma en la que venían facturando y va a obligar a enviar la información de la factura en un período muy corto de tiempo”.

Los asesores fiscales prevén que los autónomos tendrán un plazo de días para emitir cada factura

Habrá que estudiar el nuevo papel de los gestores y asesores con la factura electrónica. Estrade explicó que, “cuando se hace una factura electrónica, entra directamente a la contabilidad del negocio” por lo que “no van a tener que picarla los asesores y gestores”. Avanzó, con ello, que su función será “mandarla como intermediario a Hacienda”, aunque valoró que “es algo que aún hay que estudiar”, dado que “su disponibilidad para realizar los envíos es mayor que la del autónomo que trabaja solo, por ejemplo”. 

En ese sentido, respondiendo a las dudas de los autónomos sobre los márgenes de tiempo para establecer los estados de la factura, también aclaró que la inmediatez de la factura vendrá ceñida por la fecha de la misma, y pronosticó la posibilidad de que los procedimientos se asemejen al Suministro Inmediato de Información (SII), como ya hizo Celia Ferrero, vicepresidenta de ATA, anteriormente. Así, argumentó que “cuando se habla de la facturación en tiempo real, una cosa es crear una factura y dejarla detenida, sin fecha ni número de factura (porque se está haciendo y creando) y otra es cuando a la factura se le introduce la fecha”.

Según Estrade, “lo que sería lógico es que sea en este segundo paso en el que se envíe al cliente y a Hacienda” y que los plazos para enviarla tengan una pequeña duración, “como sucede con el SII”. Ahora mismo, “en el Suministro Inmediato de Información de empresas, los períodos para enviarla son entre cuatro y siete días, y no sorprendería que para esta factura electrónica los períodos sean los mismos y que el período de envío comience en el momento en que el usuario pone la fecha”. 

Con ello, el vicepresidente segundo de ASEFIGET abogó por la necesidad de esos plazos, dado que el proceso de introducción de los datos “puede demorarse días”. En su opinión, “hay facturas que son enormes, puedes tardar, perfectamente, más de un día en hacerlas”; por ello, “tiene sentido que a partir de que la factura esté acabada y el autónomo introduzca una fecha, esté ese plazo disponible para enviarla al cliente y a Hacienda”, que, en caso de que sea como en el SII, “serán como mínimo cuatro días”.

Y en el caso de los clientes, “tiene sentido que el plazo comience desde el día que la recibe”, si no “el procedimiento se complicaría mucho, porque puede ser que el usuario suba la factura a Hacienda pero, por ejemplo, por despiste mande al cliente la factura al octavo día; en ese caso éste ya estaría fuera de plazo”. 

Estrade aclaró que así es como operan actualmente “con las empresas del SII con las que trabajan” y que son ellas "las que introducen los datos". Según trasladó de ASEFIGET “en principio, las empresas que funcionan por el SII hacen las facturas ellos mismos, las mandan a los gestores, y éstos son los intermediarios que las transmiten a Hacienda”, si bien apuntó que “habrá que ver cómo se estudia y qué dice el reglamento al respecto”, especialmente porque “hay autónomos que trabajan solos y eso dificulta el trabajo”.

Los asesores recalcan el papel de la factura electrónica para rebajar impuestos a largo plazo

Uno de los aspectos que valoraron desde ASEFIGET es el papel de la factura electrónica para combatir la morosidad. “El camino que puede desarrollarse al respecto puede ser beneficioso”. Así, según Estrade, “es un tema interesante porque, si efectivamente logra reducir parte de la economía sumergida, a lo mejor, en el futuro, puede traducirse en una reducción en los tipos impositivos, gracias al aumento de recaudación”.

Además de “modernizar el proceso de cara a la lucha contra el fraude”, el vicepresidente segundo ASEFIGET vio poco probable que “la factura electrónica vaya a evitar que el autónomo deba abonar el IVA aunque no lo haya cobrado, o que modifique los períodos de las liquidaciones”. Aunque, si sale adelante el reglamento de la Comisión Europea para hacer efectivo el pago a proveedores en 30 días, “va a ser más sencillo el pago” dado que “va a estar ya recaudado en las facturas que el usuario lance”. En ese sentido, apuntó que “beneficiará mucho a los autónomos y empresarios porque ayudará a que haya menos retraso en el pago de las facturas”, si bien todo está por ver “porque aún tiene que instaurarse el IVA franquiciado”