ANFAC lanza ocho propuestas al Transporte para que la transición ecológica les sea rentable

Los fabricantes piden mayores bonificaciones para los transportistas que se cambien a vehículos eléctricos

La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) ha lanzado una propuesta con ocho medidas concretas para ayudar a los transportistas a que la transición ecológica también les sea rentable. 
Los fabricantes piden mayores bonificaciones para los transportistas que se cambien a vehículos eléctricos

La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) ha realizado una propuesta con ocho medidas para contribuir a una descarbonización del sector del transporte que sea eficiente pero competitiva. ANFAC presentó la Hoja de Ruta del Vehículo Industrial y Autobús 2024-2026, donde recoge una medida transversal y siete acciones prioritarias en diferentes áreas para avanzar con los objetivos para reducir la huella de carbono y las emisiones de CO2 establecidos por la UE. Los objetivos de descarbonización de la Unión Europea fijan en un 30% la reducción de emisiones para 2030 en los vehículos pesados y hasta del 90% en 2040.

Así, la asociación pretende, a través de este conjunto de propuestas, que las empresas y transportistas “puedan llevar a cabo la transición medioambiental eficaz, ya que el vehículo es su herramienta de trabajo”. Esto se consigue con medidas reales, que “ayuden a mantener la competitividad del sector del transporte por carretera, ya que este segmento aporta al PIB español un 4,8%”, trasladaron desde ANFAC. Para ello, el proceso de cambio “no puede estar centrado solo en la reducción de emisiones, sino que tiene que ser rentable para autónomos, pymes y grandes empresas”, afirmó Félix García, Director de Comunicación de ANFAC.

Según García, la patronal sostiene la necesidad “de una mayor implicación de las Administraciones”, así como “de medidas que logren incentivar la transición, y una aceleración de las infraestructuras de recarga”. El proceso de transición ecológica requiere de poner el foco en los usuarios primeros de los vehículos. “Es su herramienta de trabajo. A quien hay que incentivar fiscalmente para que cambie de camión es a los autónomos y empresas, no a los fabricantes de vehículos, si bien nosotros estamos en ello para conseguir esos vehículos 100% eléctricos y con cero emisiones”. Sin esos incentivos fiscales, “no se puede dar el salto”.

ANFAC propone un mayor apoyo para la transición, tanto económico como de las Administraciones

La patronal aboga por una implicación mayor de las Administraciones y mayor apoyo económico para lograr la transformación ordenada del sector al ritmo que han fijado los gobiernos. Para ello, desde ANFAC solicitaron “proteger la competitividad del sector de vehículos pesados a través de medidas que avancen en los objetivos de descarbonización fijados por la Unión Europea para 2030, mejoras del Plan Mitma Moves hasta 2026, y la creación de una mesa de trabajo para el vehículo industrial y el autobús con la Administración”.

Wayne Griffiths, Presidente de ANFAC, señaló en el acto de presentación "su pleno compromiso por avanzar en la descarbonización, pero diferenciando la descarbonización de los vehículos industriales de la descarbonización de los turismos”. El presidente recalcó la importante dependencia comercial y económica del transporte por carretera de nuestro país, "donde cerca el 90% de las mercancías son transportadas por carretera". 

Según trasladaron de ANFAC, estas medidas se han propuesto con la intención de que "España siga siendo competitiva en el transporte por carretera en Europa". Además, como medida transversal, la asociación aboga por la creación, junto con la Administración, de una Mesa de Trabajo para el Vehículo Industrial y Autobús a nivel nacional, que tenga como miembros "a los ministerios responsables de los objetivos de descarbonización sectorial e industrial, los fabricantes y comercializadores de vehículos y los transportistas de mercancías y pasajeros por carretera", con el fin de consensuar medidas. 

Medidas que plantea ANFAC para favorecer la descarbonización del transporte

En cuanto a las áreas de actuación prioritarias, ANFAC plantea las siguientes medidas:

  • Acciones de mercado. Continuidad para los programas de ayuda a la compra de vehículos como en el caso del MITMA MOVES, pero con mejoras su enfoque y aplicación. Para ello, se solicita que el cobro de las ayudas sea de forma rápida y eliminando costes administrativos superfluos. “Lo que reclamamos es que haya ayudas directas, en el acto de la compra. Si hay que esperar veinte meses para lograr una ayuda, esto al final lo que genera es que se desincentiva. La empresa, y sobre todo, el vehículo pesado, tienen que saber que pueden contar con la ayuda pronto”, añadió Félix García.  Además, en 2022, apenas un 0,7% del mercado de los vehículos industriales matriculados fue electrificado, es decir, “con vehículo eléctrico puro, con hidrógeno, de batería, o híbrido enchufable”. Los objetivos que se proponen a nivel europeo el CO2 "piden de aquí a siete años reducir las emisiones a la mitad”. Según García, el porcentaje de vehículos electrificados es así de bajo porque realizar trayectos transfronterizos es una de las problemáticas. “Hoy por hoy, no es posible, por ejemplo, llevar fresas desde Huelva a París, o a Ámsterdam, en un camión eléctrico. Tiene que ser diésel o gas natural. No hay hidrogeneras, y no hay puntos de recarga; no hay una infraestructura”, detalló García. “Es necesario que se aceleren las infraestructuras de recarga, teniendo en cuenta, además, que no es lo mismo la infraestructura que requiere un camión que la de un turismo".
  • Medidas en materia de fiscalidad. Las medidas de fiscalidad, como las deducciones en el Impuesto de Sociedades por la compra de vehículos pesados de bajas emisiones, la mejora de su amortización o la exención en el Impuesto Especial sobre la Electricidad para la recarga de vehículos, son esenciales para garantizar la transición energética del transporte. Tal y como mencionó el Director de Comunicación de ANFAC, en otros países, el proceso de descarbonización ya se está incentivando. Así, en Portugal, donde se aplican diferentes incentivos fiscales, las ventas de coches eléctricos son tres veces mayores que en España. “Con bonificaciones al IVA y al Impuesto de Sociedades, mecanismos que no hay que inventar, sino que ya están ahí, se puede lograr una transición más rápida. Basta con copiar a nuestros socios europeos. En Portugal, ya se está bonificando a las empresas”. 
  • Las bonificaciones son una herramienta para favorecer la rentabilidad de los negocios durante el proceso de transición. "En el caso de los vehículos pesados, prácticamente todas las compras son de autónomos, pymes o grandes empresas; es decir, es su herramienta de trabajo. La transición tiene que asegurar la rentabilidad de los negocios para que sea factible el proceso", analizó García. Así, “si a estos autónomos o empresarios no les sale a cuenta el eléctrico, van a seguir con vehículos diésel. Como detalle, una cabeza tractora de un tráiler grande de diésel vale en torno a 100.000 euros, mientras que la eléctrica pura está en torno al medio millón. Si tienen esos costes y, además, no hay puntos de recarga, hay que incentivarlos de alguna forma para que hagan el cambio. Para ello, no solo hay que centrarse en reducir las emisiones, sino que el procedimiento tiene que ser rentable”. También, acelerar la amortización “permite tener menos costes y más beneficios para los negocios”.  Este tipo de medidas, “ayudan a los negocios a dar el salto a la electromovilidad, o a las cero emisiones. La clave es que salga rentable a los compradores”, apuntó García. 
  • Creación de infraestructuras de recarga eléctrica de alta potencia y repostaje. La asociación aboga por crear el Centro Estatal para el despliegue de Infraestructuras de Recarga de Vehículos Eléctricos y Repostaje de Vehículos Alternativos (CEIRVEA). García detalló que “la creación de una infraestructura de recarga es esencial, ahora mismo no la hay. Para los camiones es necesario puntos más amplios en los corredores, y puntos a partir de 450kw cada uno”
  • Conectividad y automatización de las funciones de conducción. ANFAC considera prioritario permitir la circulación de vehículos pesados con funciones de conducción totalmente automatizadas de hasta el nivel de autonomía SAE 4. Además, en el marco del vehículo conectado, debe asegurarse la privacidad del usuario de conformidad con el reglamento europeo de protección de datos (GDPR), así como definir un marco común para la descripción de los datos del vehículo y crear un catálogo de datos disponible.
  • Regulación europea y española. En cuanto a la normativa europea, ANFAC reclama una unificación de criterios. La asociación prioriza alcanzar, “con el esperado apoyo de la presidencia española, un compromiso satisfactorio sobre el reglamento que debe fijar los límites de emisiones de CO2 de los vehículos pesados, ahora en discusión”. Para la asociación es importante lograr un acuerdo final y unificado razonable en  la propuesta de la normativa de emisiones Euro 7, especialmente en el caso de los vehículos pesados. “El conductor de un camión, sea del tipo que sea el vehículo, debe tener la misma regulación para entrar y circular por las ciudades, ya sea en España o en cualquier otro país. No tiene sentido que en función del país europeo la normativa difiera y haya diferentes regulaciones”, aclaró García. 
  • Política industrial. Según ANFAC, las fábricas de vehículos comerciales e industriales de España están afectadas por la transformación de la movilidad y la necesidad de competir a nivel internacional según su tecnología. "Las desgravaciones fiscales son un instrumento muy valorado por las empresas, y actualmente en España los incentivos fiscales a la I+D+i son inferiores a otros países de la UE". Por ello, requieren luchar contra el incremento de costes energéticos desproporcionados en la industria no energéticamente intensiva, para compensar el aumento de los costes energéticos a sectores no catalogados como electrointensivos o gasintensivos, pero "extremadamente sensibles a la competencia internacional, como la automoción".
  • Modelo de movilidad. El modelo de movilidad debe ser adecuado a las necesidades del sector, enfocándolo desde un punto de vista equilibrado y homogéneo en el territorio. Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) son clave para reducir los gases contaminantes en los núcleos urbanos, pero "hacen falta bases y criterios comunes para facilitar su implementación por parte de los municipios, además de asegurar que pueden acceder a ellas los vehículos de transporte urbano de mercancías". Desde ANFAC, ponen el foco en las Zonas de Bajas emisiones y su regulación. "Cuando la UE pide descarbonizar, lo más sensato es eliminar vehículos pesados de hace treinta años; se consiguen más beneficios eliminando este tipo de vehículos que reemplazando los de diésel más nuevos, ya que emiten alrededor de un 90% menos. Queremos que se regule para evitar que ese tipo de vehículos tan antiguos puedan entrar", aclaró García.