No se debe olvidar sumar un tercio más sobre lo pactado

Lo que le cuesta a un autónomo contratar un empleado

El sueldo de un trabajador tan sólo es una parte de lo que realmente cuesta contratar a un empleado. Los emprendedores que quieran averiguar lo que realmente significa incorporar a un trabajador, deberán tener en cuenta todos y cada uno de los costes sociales que hay que asumir mensualmente. Estos se calculan en relación al salario bruto y pueden suponer un 33,1% más. 

Lo que le cuesta a un autónomo contratar un empleado

Llega un momento en el que el autónomo se plantea contratar a un trabajador. Antes de nada es importante conocer los costes sociales que van añadidos al sueldo bruto y calcular si se puede asumir el gasto. La remuneración que el trabajador percibe es tan sólo una parte de lo que el autónomo deberá invertir cada mes para mantenerlo en nómina.  

Por tanto, antes de tomar la decisión de incorporar a un nuevo miembro en el equipo, es necesario calcular primero cuál será su coste real, es decir, el autónomo deberá diferenciar claramente entre el sueldo liquido del trabajador, lo que se le retiene, y los costes sociales que el autónomo debe pagar proporcionalmente al salario bruto. En primer lugar está la remuneración líquida que percibe el trabajador a cambio de su trabajo, también llamado sueldo neto. A ello hay que añadir las retenciones que asume el empleado. Y en último lugar, y en función de los dos conceptos anteriores, ya se puede calcular lo que al autónomo tendrá que afrontar y que se calcula sumando los costes sociales al sueldo bruto del empleado (neto y retenciones). 

Por tanto, aunque el trabajador finalmente perciba  tan solo el sueldo liquido, lo que el autónomo realmente está pagando por el es el salario más los costes sociales. Para saber cuánto cuesta un trabajador, el primer paso para el autónomo es averiguar la cuantía estipulada en el convenio colectivo al que pertenece su actividad, diferente en cada sector y comunidad autónoma. Eso, sin tener en cuenta los complementos salariales que aumentan en buena medida lo que le cuesta el trabajador al negocio.

Así, poniendo un ejemplo genérico, si el autónomo está dispuesto a pagar un sueldo liquido de 1.200  euros deberá pactar un sueldo de alrededor de 1.460 euros brutos. Siempre es recomendable que el sueldo pactado sea el bruto- el neto más la parte de la cotización a la Seguridad Social que le corresponde al trabajador, la retención del IRPF, Desempleo y Formación.

Sin embargo, como se ha dicho, hay una segunda partida de gastos relacionada con el importe que el trabajador por cuenta propia deberá abonar en concepto de costes sociales de su asalariado. Esta cantidad puede ascender hasta el 33.1% sobre el sueldo bruto dependiendo de si el contrato es indefinido, temporal o a tiempo parcial.

Costes sociales a pagar por el autonómo 

Es esencial insistir en que lo que realmente le cuesta a un autónomo contratar a un trabajador es el resultado de sumar sueldo bruto más costes sociales. Por tanto, hay una serie de costes sociales que se aplicarán en forma de porcentaje sobre el sueldo bruto y que, juntos, darán como resultado el coste real de un trabajador para un autónomo. 

  • Cotización por contingencias comunes:  

Es el gasto más importante de todos los costes que el autónomo debe pagar por su trabajador a la Seguridad Social. El importe es del 23.60% del sueldo bruto. 

  • Cotización por contingencias profesionales: 

En este caso, el importe es variable y dependerá del riesgo que conlleve el desarrollo de la actividad. Siendo el gasto por contingencias de una actividad con poco riesgo, como el trabajo de oficina, de un 1% sobre el salario bruto del trabajador y el coste en una actividad peligrosa como la construcción de hasta un 6.70%.

  • Cotizacion por desempleo

El gasto de cobertura del paro del trabajador también es variable y oscilará en función del tipo de contrato que se formalice con el empleado, siendo el indefinido –con un 5.50% sobre el sueldo bruto- el más barato y el temporal a tiempo parcial –con un 7.70%-  el que conlleva un pago por contingencias más elevado. 

  •  Cotización por formación profesional y en el Fondo de Garantía Salarial 

El gasto por formación del empleado es de 0,60% sobre el sueldo bruto. Además, el autónomo deberá aportar un 0.20% del salario bruto en concepto de garantía salarial.