¿Puede un autónomo deducirse los gastos de su vivienda si está en régimen de gananciales?
Los autónomos que trabajan desde casa pueden deducirse gastos como Internet, electricidad, agua o IBI. Siempre y cuando demuestren que parte de su domicilio está afecto a la actividad, el Fisco parece no poner demasiadas trabas. Pero ¿y cuando el domicilio es también propiedad de su cónyuge? ¿Puede deducirse el autónomo los gastos de una vivienda en gananciales?
Tras la aprobación de Ley de Medidas Urgentes para el Trabajo Autónomo, Hacienda permite al autónomo deducirse de forma parcial los gastos de su vivienda cuando trabaja desde casa. El trabajador por cuenta propia que utilice su domicilio para el desarrollo de su actividad puede desgravarse los suministros como el gas, la electricidad, Internet o incluso el agua de la vivienda. Pero ¿y cuando la vivienda está en gananciales? ¿puede un autónomo deducirse los gastos cuando la vivienda en la que trabaja también es de su pareja?
Después de un tiempo sin resolverse, la pregunta ya tiene respuesta. Para la Dirección General de Tributos la afectación de la vivienda para una actividad por cuenta propia se produce de igual manera esté el domicilio en gananciales o no. Para despejar dudas a este respecto, el Fisco se remitió al artículo 29 de la Ley del IRPF sobre elementos patrimoniales afectos.
Dicho artículo explica que dentro de los elementos patrimoniales afectos a una actividad económica se considerarán como tal “los bienes inmuebles en los que se desarrolla la actividad del contribuyente”. En otras palabras, que la vivienda sea propiedad de dos personas no impide que se considere afecta a una actividad económica y, por tanto, deducible para el autónomo. Sin embargo, sí es cierto que aunque el autónomo utilice la vivienda para su actividad, cuando está en gananciales, solo le corresponde la mitad del domicilio. Entonces, ¿la deducción se calculará sobre la mitad de la propiedad que le corresponde o sobre el total del domicilio?
¿Qué cantidad de la vivienda en gananciales puede desgravarse?
La Dirección General de Tributos también se ha pronunciado al respecto. Aunque el autónomo sea solo el propietario del 50% de la vivienda, puede calcular la deducción sobre el total de la propiedad. Así lo explicaron desde el despacho de abogados Ático Jurídico, dónde apuntaron que “el cónyuge autónomo podrá deducir los gastos y suministros de la vivienda, calculándolos sobre la totalidad de los metros cuadrados que destine a la actividad, aunque él sólo sea propietario del 50% de estos metros”.
Y es que, la cuestión relevante en este caso es la cantidad de metros que un autónomo dedica a su actividad y no la cantidad de metros que le pertenecen. Por lo tanto, en la decisión de la Dirección General de Tributos, el cónyuge no tiene relevancia a la hora de desgravar los gastos de la vivienda ya que supuestamente, no interfiere en la parte del domicilio afecta a la actividad, sino justamente en la otra. Así pues, los gastos que puede deducirse un autónomo cuando trabaja desde casa y su vivienda es ganancial, son los mismos que cuando no lo es.
Gastos que puede deducirse un autónomo que trabaja desde casa
En el caso de la vivienda, los trabajadores por cuenta propia lo tienen más fácil para justificar al Fisco su utilización para fines profesionales, que cuando lo intentan con otros gastos como, por ejemplo, los del coche. Los autónomos que comparten oficina y domicilio podrán deducirse los gastos de agua, luz, gas, telefonía e Internet en el porcentaje resultante de aplicar el 30% a la proporción que haya entre los metros cuadrados de la vivienda destinados a la actividad respecto a la superficie total, salvo que se pruebe un porcentaje superior o inferior.
Y es que, en este caso, la Ley del IRPF permite afectar de forma parcial la actividad de un inmueble. Esto hace que resulte mucho más sencilla la justificación del uso de la vivienda para fines comerciales. El autónomo puede indicar al Fisco de forma exacta qué metros cuadrados de la vivienda va a destinar a su actividad por cuenta propia. Y es que, justificando la afectación parcial, el autónomo no sólo puede deducirse una parte de los gastos de suministro en la parte de la vivienda afecta a la actividad. “También puede desgravarse la parte proporcional – en relación a los metros cuadrados usados para el trabajo- del IBI, amortizaciones, comunidad de propietarios o tasa de basuras “ concluyeron desde el despacho de abogados Ático Jurídico.