El transporte y más sectores conservarían su régimen

Hacienda planea mantener el sistema de módulos y sus actuales límites hasta 2023

El Ministerio de Hacienda planea conservar, como mínimo hasta 2023, el régimen de módulos y sus actuales límites. Los transportistas y los demás sectores que tributan por este sistema conservarían su actual situación.
El régimen de módulos y los límites actuales seguirán vigentes hasta 2023
Hacienda planea mantener el sistema de módulos y sus actuales límites hasta 2023

Los autónomos acogidos al régimen de módulos podrían respirar tranquilos, al menos, hasta 2023. Si bien el Ministerio de Hacienda planeaba llevar a cabo una reforma del sistema fiscal a lo largo de este año, lo cierto es que aún ni siquiera han convocado la mesa de diálogo social para discutir esta forma de tributación. De hecho, fuentes oficiales del Ministerio aseguraron a este diario digital que "no será hasta febrero de 2022 cuando se presenten las conclusiones del comité de expertos, posteriormente se tendrá que convocar la mesa de diálogo y social y, en caso de que se formalizase dicha reforma, ésta no entraría en vigor hasta, como mínimo, el 1 de enero de 2023". Por ende, tanto los transportistas como el resto de sectores de autónomos afectados por este debate mantendrán su régimen y límites actuales, por el momento, durante un año y tres meses más.

La derogación o no del régimen de tributación por estimación objetiva es un debate muy recurrente ya que, mientras que para algunas voces es un nido de fraude fiscal, para otras es precisamente lo contrario, un método para que muchos autónomos en actividades donde es no es fácil computar ingresos y gastos tengan un sistema tributario sencillo. Sobre todo aquellos que facturan directamente al consumidor final. Además, este régimen de estimación objetiva ayuda a miles autónomos con rentabilidades muy bajas que, sin los módulos, podrían verse en peligro. Tanto es así que no sólo las organizaciones representativas del colectivo como la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) luchan por mantenerlo, sino que también economistas y expertos advirtieron que “la eliminación de los módulos supondría el cierre de muchos profesionales que no podrán mantener sus actividades. Pasarían a cotizar por el sistema estimación directa, donde además de sus gastos, tendrían que presentar sus ingresos y libros de cuentas, lo que incrementaría considerablemente el coste y la carga tributaria", explicó el abogado laboralista Alberto Ara.

En España hay más de 400.000 trabajadores por cuenta propia que pagan sus impuestos por módulos. Desde peluqueros, hasta carpinteros, pequeños comerciantes, cafeterías, restaurantes, transportistas, taxistas o agricultores, que pueden presentar sus impuestos por este régimen de forma sencilla 

Los límites actuales también seguirán hasta 2023

Otra de las grandes preocupaciones que giran entorno a la posible de reforma de este sistema de tributación es la modificación de los límites de facturación para que un autónomo pueda continuar dentro del régimen de módulos. Desde hace años planea sobre las cabezas de estos autónomos una reforma tributaria que pretende reducirlos desde los 250.000 euros anuales actuales a 120.000 en el caso de los autónomos que facturan directamente a sus clientes; y de los 150.000 euros anuales a 75.000 euros para quienes lo hacen a otras empresas. De ser así, miles de autónomos afectados tendrían que pasar a la tributación por estimación directa, mucho más complicada y cara para ellos.

En especial, uno sectores más afectados por esta posible reforma e interesados en el mantenimiento del sistema de módulos, y sus límites vigentes, son los transportistas. Alrededor de 128.000 moduleros pertenecen al sector del transporte, muchos de los cuales se quedarían fuera de este sistema si se modificasen los límites de facturación. Según los cálculos de la federación de transportistas, un autónomo que ha facturado entre 85.000 y 90.000 euros en un año suele pagar unos 13.000 euros a Hacienda en el sistema de módulos. Sin embargo pasaría a tributar 23.000 euros si estuviera adscrito al sistema de estimación directa. Esta mayor carga tributaria sería inasumible para moles de pequeños transportistas a los que no les merecería la pena seguir trabajando por lo que tendrían que optar por abandonar la actividad, algo que beneficiaría también a las grandes empresas de logística, han denunciado en diversas ocasiones las organizaciones de autónomos transportistas. 

De hecho, Fetransa cifró entre 1.500 y 2.000 euros más al año lo que tendrían que soportar cada uno de estos profesionales sólo en gestión de sus declaraciones si cambiaran de la estimación objetiva a la directa

Su eliminación también podría perjudicar al Fisco

La posible eliminación del sistema de módulos no sólo sería perjudicial para el colectivo de trabajadores por cuenta propia, sino que también complicaría la labor de la propia Administración. Tal y como explicó el abogado laboralista Alberto Ara, "este sistema facilita llevar la contabilidad del administrado, por lo que su supresión supondría mucho más trabajo para Hacienda". Por otra parte, Ara destacó que si se eliminan los módulos, la Agencia Tributaria "tendría que aumentar su plantilla de inspectores para comprobar que todos los profesionales que pasen a estimación directa cumplan correctamente con sus cuentas fiscales y evitar el fraude".

Más allá de las ventajas e inconvenientes de este sistema de estimación objetiva, desde diferentes ámbitos, los expertos advierten que la eliminación del sistema de módulos podría ser un problema para el control del fraude. Máxime cuando miles de estos moduleros son pequeños autónomos al frente de quioscos, negocios de venta ambulante o bares en zonas rurales, donde se utilizan mecanismos muy rudimentarios para el cobro y en muchos casos no hay forma de vigilar las transacciones.

Para los Inspectores de Hacienda, éste sería precisamente uno de los motivos por los que se debería apostar por un sistema intermedio, "que mantenga durante un periodo transitorio a los autónomos que venden directamente al consumidor final y que aquellos que venden a empresas, que es donde se concentra la mayor parte del fraude en este régimen, pasen a estimación directa", explicó Julio Ransés, presidente de la Asociación Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE).

A pesar de todo, Ransés considera que "la tecnología ha avanzado mucho en los últimos años y nos permitiría tener controlados a más del 90% de los contribuyentes que ahora mismo están en módulos. En todo caso, los medios que tenemos y los que tendríamos en una eventual desaparición del sistema de módulos deberían garantizar tener alguna clase de control sobre las operaciones. Por ello, habría que asegurarse de contar con las herramientas oportunas".  Unas herramientas dependerían de la tecnología: "si se planteara un periodo transitorio para la eliminación de los módulos, habría que plantear también la obligatoriedad de contar con TPV's en todos los comercios y establecimientos de hostelería. Con estos terminales conectados a la red, que ya tienen la gran mayoría de negocios, se podría hacer un volcado inmediato con la Agencia Tributaria. Por supuesto, también habría que controlar y concienciar mucho más sobre la obligatoriedad de emitir tickets para que llegue un momento en el que sea el cliente final el que los reclame", concluyó el presidente de IHE.