Andalucía y Madrid lideraron el crecimiento en 2019

La Tarifa Plana frena la caída de autónomos en algunas CCAA

Durante 2019, Andalucía y Madrid sostuvieron el crecimiento del colectivo, gracias en buena parte a la Tarifa Plana. Ambas regiones, que cuentan con la ampliación de esta prestación, sumaron 17.200 nuevos afiliados al RETA y de ellas dependió más del 80% de la creación de empleo autónomo en España.

 

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La Tarifa Plana frena la caída de autónomos en algunas CCAA

Una vez más, los datos de afiliación a la Seguridad Social a cierre de 2019 demuestran que los incentivos al emprendimiento (bonificaciones o reducciones, entre otros) tienen efectos positivos en la creación de empleo. Andalucía y la Comunidad de Madrid fueron las dos regiones que sostuvieron el crecimiento del empleo autónomo durante el año pasado. Entre ambas sumaron 17.208 nuevos afiliados al RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos), 2.783 más que el resto de España (14.425). Se da la circunstancia de que las dos cuentan con la extensión de la Tarifa Plana durante los dos primeros años de actividad y que, además, gozan de una menor presión fiscal.

En concreto, Andalucía incrementó en 11.463 el número de trabajadores por cuenta propia, alcanzando los 539.324 afiliados. De hecho, sólo esta comunidad sostuvo el 80% de la creación de empleo autónomo en toda España. Las afiliaciones al RETA en Madrid  se elevaron en 5.745 con respecto al año pasado, hasta los 407.514. 

El despegue de ambas regiones, junto con los avances de otras como la Comunidad Valenciana, Canarias (ambas con más de 3.500 nuevas altas), Baleares o Murcia -que cuenta con una cuota cero para los nuevos emprendedores inscritos en el sistema de Garantía Juvenil-, compensó la caída de afiliación en el resto de España. Fueron nueve las regiones -entre las que destacan Aragón y Castilla León, donde el número de autónomos cayó en 2.876 y 2.588 afiliados, respectivamente-  que perdieron trabajadores por cuenta propia, acumulando entre todas un negativo de 11.593. 

Así, y pese a que el crecimiento de autónomos cerró 2019 en positivo, las cifras de Seguridad Social demuestran que la ralentización del mercado laboral y, en particular, del emprendimiento, es un hecho. Mientras que en el año 2018 se generaron 49.986 nuevos puestos de trabajo autónomo, lo que representó un avance del 1,56%, el año 2019 culminó con un saldo de 14.425 nuevas afiliaciones que, en términos relativos, significa un 0,46%. Es decir, siete veces menos de crecimiento de un año para otro.

A este respecto, y tras conocer los datos, Lorenzo Amor, presidente de ATA (Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos) señaló este descenso como una mala noticia para el colectivo. El número de autónomos en 2019 creció un 70% menos de lo que lo hizo en 2018 ”.

Además de a la coyuntura económica internacional que soporta amenazas como el Brexit o la guerra comercial, gran parte de la responsabilidad de los resultados se debe a la falta de un Gobierno estable en España. Esto no sólo impidió que en 2019 se pusieran en marcha muchas de las medidas cruciales para el mercado laboral, sino que también provocó que se vertieran mensajes contradictorios sobre las políticas a futuro, generando incertidumbre y paralizando las inversiones. En relación a ello, Amor insistió en que “la política económica y laboral, la estabilidad y la confianza son fundamentales para invertir esta curva descendente que se está produciendo en el mercado de trabajo, en general, y en el empleo autónomo en particular”.

Caída del comercio y las manufacturas

Como viene siendo habitual en la serie histórica, las caídas más acentuadas se produjeron en los meses de enero (con 20.300 autónomos menos), agosto (que acumuló unas pérdidas de 17.300), julio y noviembre (con negativos de 7.800 y 2.300, respectivamente), lo cual se debe a la estacionalidad propia de algunos sectores como educación y hostelería.

No es el caso del comercio y las manufacturas, que no dependen tan directamente de la temporalidad pero que se desplomaron hasta perder casi 23.100 autónomos (13.010 las manufacturas y 10.069 el comercio). Que haya menos trabajadores por cuenta propia en estas actividades económicas no es en absoluto un buen síntoma. Cuando la producción manufacturera cae suele deberse a una contracción de la demanda. En el caso del comercio, ocurre lo mismo. De hecho, las ventas este último año crecieron cinco puntos menos que en 2018, según los datos del INE (Instituto Nacional de Estadística).

Respecto a los sectores donde más creció el número de autónomos, construcción y actividades profesionales científicas y técnicas volvieron a encabezar la lista, ambas con más de 6.000 nuevos afiliados al RETA. Llama también la atención el incremento de los autónomos que trabajan para la Administración Pública. Aunque -en términos absolutos- la cifra no es representativa (137 nuevas altas), el crecimiento en términos relativos es del 13,01%, el mayor de todos.

Si atendemos al género de los nuevos autónomos, son las mujeres las que protagonizaron el crecimiento del número de trabajadores por cuenta propia: sumaron 14.167 más en un año. Con ello, lograron ser ya el 36% del colectivo.

El peor diciembre desde 2012

En términos de afiliación general, el conjunto de sistemas de la Seguridad Social alcanzaron un total de 19.408.538 afiliados en 2019, esto es un 2% más (384.373) que en 2018. Así, el crecimiento se rebajó más de un punto con respecto a los años de recuperación, cuando la creación de empleo llegó a alcanzar tasas por encima del 3% y se crearon más de medio millón de empleos al año.

Además, el último mes del año registró 31.659 cotizantes más, apenas un 0,1% de crecimiento respecto a 2018, lo que significa el menor repunte desde 2013 y el peor diciembre desde 2012.

En cuanto a las cifras de paro, este año, registraron el peor dato anual desde 2012. Si bien es cierto que el número de desempleados inscritos en las oficinas de empleo descendió un 1,2%, 38.692 personas en 2019, fue un descenso muy inferior al registrado en 2018, cuando el paro se redujo en 210.484 personas (-3,2%).

El presidente de ATA mostró también su preocupación por el que ha sido peor cierre del mercado de trabajo desde que España salió de la crisis. “Ha habido un fuerte frenazo en la creación de empleo y reducción del paro. En 2018, el desempleo bajó en 210.484. En 2019, en 38.692, es decir, una quinta parte de  la reducción que se produjo el año anterior. Por otra parte, este año se crearon un tercio menos de puestos de trabajo que en 2018, lo que supone 180.000 empleos menos que el año pasado"