Primera ley sobre Inteligencia Artificial: ¿cómo afectará a los autónomos?
El Parlamento Europeo ha aprobado recientemente la Ley de Inteligencia Artificial, un reglamento que busca asegurar la seguridad y el cumplimiento de los derechos fundamentales de las personas mientras se regula el avance en innovación tecnológica. Esta iniciativa pionera puede repercutir en los negocios de los autónomos, los cuales tendrán que adaptarse si utilizan estas herramientas para, por ejemplo, analizar datos o mejorar sus procesos..
Fuentes del del Parlamento Europeo explicaron que “el objetivo de esta primera ley es salvaguardar los derechos esenciales, la democracia, el Estado de derecho y la preservación del medio ambiente frente a la Inteligencia Artificial que posee un riesgo significativo, al mismo tiempo que promueve la innovación y posiciona a Europa como líder en este campo”.
El reglamento establece una serie de responsabilidades para la IA según su nivel de riesgo potencial y su impacto. La Inteligencia Artificial ya no es exclusiva de las grandes empresas y se está volviendo más accesible para las microempresas y los autónomos, y así lo confirma el informe del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad, según el cual el 4,6% de las empresas en España con menos de diez empleados ya están utilizando IA, incluso integrando robots en ciertos procesos.
El Reglamento aún está sujeto a una última comprobación jurídico-lingüística y la aplicación de la nueva ley de Inteligencia Artificial será gradual, hasta implantarse de manera definitiva en 2026.
¿Cómo deben adaptarse a la nueva normativa los autónomos?
La ley identifica ciertas prácticas de IA como inaceptables
La normativa prohíbe ciertos usos de IA que infringen los derechos ciudadanos, como la categorización biométrica basada en características sensibles, el reconocimiento de emociones en entornos laborales y escolares, y el uso de IA para manipular el comportamiento humano. Esto puede afectar a los autónomos y pequeños negocios que utilicen estas tecnologías en sus operaciones.
Los expertos del Parlamento Europeo consultados por este diario explicaron que los autónomos que utilicen estas tecnologías de IA, como por ejemplo, si utilizan sistemas de reconocimiento facial en sus establecimientos, deben asegurarse de que no estén capturando imágenes de personas sin su consentimiento o utilizando esos datos biométricos de manera inapropiada, lo que podría resultar en multas o sanciones.
Otras categorías que abarcan los sistemas de inteligencia artificial que alteran la conducta humana para influir en las decisiones de los usuarios son los deep fakes -videos o imágenes falsos que parecen auténticos y muestran a personas haciendo o diciendo cosas que nunca hicieron o dijeron- que propagan información falsa.
Los autónomos que cuenten con sistemas de IA en su establecimiento deben hacerse responsable de los datos que recopilen
El uso de sistemas de identificación biométrica por parte de las fuerzas de seguridad se va a regular “de manera estricta”. Esto puede influir en cómo los autónomos y pequeños negocios interactúan con las autoridades y cómo gestionan la seguridad en sus establecimientos.
Los expertos señalaron que la ley puede requerir que los autónomos que utilizan IA en los dispositivos de seguridad de su establecimiento asuman una mayor responsabilidad en el manejo y la protección de datos de los clientes.
La ley implica algunas obligaciones específicas para algunas actividades de los autónomos
La ley también establece reglas para sistemas de inteligencia artificial que son considerados de alto riesgo debido a su potencial impacto negativo en áreas como la salud, seguridad y derechos fundamentales. "Esto incluye sectores como educación, empleo, y servicios esenciales como salud y banca".
Los autónomos pueden adaptarse evaluando y reduciendo los riesgos de los sistemas que utilizan, manteniendo registros claros, siendo transparentes y precisos, y asegurándose de tener supervisión humana. Además, los ciudadanos tienen derecho a presentar quejas y recibir explicaciones sobre decisiones basadas en estos sistemas que afecten sus derechos. Para cumplir, los autónomos deben revisar sus sistemas, implementar medidas de seguridad y transparencia, y estar preparados para responder a preguntas o preocupaciones de sus clientes.
Requisitos de transparencia para los negocios que empleen la IA
La ley establece la necesidad de transparencia en sistemas de inteligencia artificial particulares, como puede ser los chatbots, con el fin de que los usuarios puedan reconocer claramente cuando están interactuando con una IA. Este requerimiento cobra especial relevancia en ámbitos como el servicio al cliente, donde la distinción entre una comunicación humana y una generada por IA puede tener un impacto significativo en la experiencia del cliente.
Los expertos señalaron que la transparencia en la utilización de IA, garantiza que los usuarios estén informados sobre el tipo de interacción que están teniendo, lo que contribuye a establecer expectativas adecuadas y a mantener la confianza del cliente.
Las pymes contarán con medidas de apoyo para la innovación y la implementación de la IA
La ley también busca establecer medidas de apoyo, como espacios de pruebas controladas, para que las pymes y empresas emergentes puedan desarrollar y entrenar IA innovadora antes de su comercialización. Esto puede beneficiar a los autónomos y pequeños negocios que deseen adoptar tecnologías de IA pero necesiten recursos y apoyo para hacerlo de manera efectiva.
Según la empresa tecnológica Sage, uno de los mayores desafíos que pueden enfrentar los autónomos es el coste y el esfuerzo necesario para cumplir con la ley. “Adaptar los sistemas de inteligencia artificial para cumplir con los nuevos estándares puede requerir muchos recursos”.
También señalaron que la ley es amplia, abarca bastantes supuestos y está en constante evolución, lo que puede generar incertidumbre, por lo que es importante mantenerse informado sobre cualquier cambio y actualización.
