Si necesitas abrir un comercio electrónico, te proponemos las tres mejores plataformas para hacerlo

El mundo ya está totalmente inmerso en la era digital. De hecho, el famoso 5G ya está aquí. Esta digitalización también afecta al comercio y a su manera de comprar y vender. Esto significa que se está abriendo paso un nuevo tipo de cliente, ese consumidor que adquiere sus productos desde el sofá de su casa a través de un ordenador.

Ya existen miles de empresas que han sabido adaptarse y sacar buen partido a sus negocios online. El problema es que, en España, solo cinco de cada cien microempresas y negocios de autónomos vende a través de internet, mientras que su competidores de la gran empresa facturaron el primer trimestre del año pasado 8.974 millones de euros a través del comercio electrónico. Un 32,8% más que en el mismo periodo de 2017, según los últimos datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMC). 

Estos datos dan a entender que el pequeño comercio todavía no ha sabido adaptarse a esta nueva forma de llevar el producto al consumidor. Tanto la falta de digitalización del sector, como la crisis estructural que está padeciendo y la escasa formación de sus profesionales, han llevado a la Confederación Española de Comercio a tomar cartas en el asunto: “O hacemos una apuesta clara por la transformación digital o este problema puede arrasar a todo el sector. El que no se adapte va a sufrir graves consecuencias”, advierte el secretario general, José Guerrero.

Por este motivo, es importante que los pequeños comercios se adentren en el mundo digital y, para ello, es necesaria disponer de una página web donde vender los productos, un e-commerce. Y el primer paso para abrir un comercio electrónico es elegir y contratar la plataforma que albergará el negocio, es decir una herramienta en la que se incluya la tienda online y que permita incorporar un sistema de pago.

¿Qué características buscar en una plataforma de e-commerce?

Cualquier plataforma de e-commerce digna de mencionar deberá incluir opciones de administración de inventario, permitirá procesar pagos y proporcionará informes de ventas. No obstante, eso es solo lo básico cuando se trata de comercio electrónico. Hostinger, el proveedor de alojamiento web internacional, señala otras características a tener en cuenta a la hora de buscar la mejor plataforma:

• La capacidad de configurar categorías de productos: Para aquellos autónomos que venden más de un tipo de artículo, ya que será necesario mantener las cosas organizadas.
• Opciones de personalización de la página de producto. Es vital poder crear páginas únicas para cada producto que contengan información completa y se vean geniales.
• Funcionalidad de promociones y descuentos. A los clientes les encantan las promociones y son una excelente manera de hacer ventas adicionales.
• Soporte para procesadores de pagos múltiples. A mucha gente le gusta usar sus procesadores de pago preferidos, así que ofrecer múltiples opciones es una excelente idea.
• Información analítica. Cuanto más sepa el vendedor sobre sus clientes, más podrá optimizar su tienda para aumentar las ventas.

Las tres mejores plataformas, según Hostinger

1. WooCommerce

A diferencia del resto de otras plataformas, WooCommerce no es una plataforma de ecommerce independiente. Es un plugin que se ejecuta en WordPress, el sistema de gestión de contenido (CMS) más popular del mundo.

Ventajas:

• La facilidad de usar el CMS de WordPress para lanzar la tienda online.
• Personalizar la tienda utilizando extensiones y temas dedicados de WooCommerce.
• Obtener soporte de la enorme comunidad de usuarios de WordPress.

Contras:

• Agregar funciones avanzadas generalmente requiere múltiples extensiones. Por lo que si la intención es abrir un comercio sencillo y rápido es un opción interesante, pero si pretende crecer no es la plataforma más viable.

2. PrestaShop

A diferencia de WooCommerce, PrestaShop es una plataforma de ecommerce dedicada. Su objetivo es permitirte configurar una tienda online atractiva lo más rápido posible, y sí que lo logra.

Ventajas:

• Configuración avanzada de administración de productos.
• Múltiples opciones de procesamiento de pagos.
• Personalizar la experiencia de pago.
• Usar analítica para obtener información sobre el comportamiento de los clientes.
• Encargarse de las consultas de soporte directamente en la plataforma.
• Supervisar los impuestos de tu producto.

Contras:

• Precisa de un proceso de aprendizaje, aunque no muy grande, para comprender las muchas características.

3. Magento

Cuando se trata de flexibilidad, Magento le lleva una gran ventaja a la competencia en el campo del comercio electrónico. Es una plataforma potente que permite crear tiendas online pequeñas y grandes. No obstante, es necesario tener algo de experiencia en desarrollo web si quieres usarlo.

Ventajas:

• Plataforma de e-commerce increíblemente escalable, perfecta para grandes tiendas online.
• Creado con el SEO (posicionamiento web) y la seguridad como principal activo.
• Admite múltiples monedas y tasas de impuestos.
• Se integra con casi cualquier procesador de pago.

Contras:

• Requiere de un proceso de aprendizaje bastante largo.
• Puede ser difícil de usar si no tienes experiencia en desarrollo web.