Ventajas y desventajas de esta modalidad

¿Por qué los autónomos no quieren declarar el IVA mensualmente a pesar de que Hacienda se lo permite?

Aunque los autónomos pueden cumplir con su obligación de declarar el IVA mensualmente, a través de REDEM,. la mayoría no apuesta por este sistema y lo sigue haciendo trimestralmente.

cuentas-calculadora
¿Por qué los autónomos no quieren declarar el IVA mensualmente a pesar de que Hacienda se lo permite?

Los trabajadores por cuenta propia tienen la obligación, como recaudadores del IVA que son, de devolver ese impuesto a Hacienda. Una liquidación que pueden hacer mensualmente (a través de REDEME) o cada tres meses (con la presentación del modelo 303). Ambas opciones son válidas para el Fisco. Sin embargo, la mayoría de los autónomos suele optar por la modalidad trimestral.

La razón de que los autónomos prefieran el método tradicional de presentar el impuesto cada tres meses, en vez de la mensual, reside en que éste sistema no se ajusta correctamente a todas las actividades, por lo que resulta “excluyente” y “poco útil” para muchos autónomos, tal y como describieron los expertos tributarios. Además de que hay un gran desconocimiento sobre el mismo.

¿Qué es el REDEME y por qué no funciona para los autónomos?

El Régimen de Devolución Mensual (REDEME) es el mecanismo que permite a los autónomos y pequeños negocios presentar el IVA mes a mes. Se trata de un Régimen que se creó para los autónomos cuya liquidación les va a salir negativa (es decir la Agencia Tributaria tiene que devolverles el impuesto) con el fin de que tuvieran mayor liquidez.

Así lo explica la Agencia Tributaria: “con este nuevo sistema se pretende evitar el coste financiero que representaba el diferimiento en la percepción de las devoluciones, especialmente en aquellos periodos de declaración en los que se habían realizado fuertes inversiones, o bien cuando se tiene la intención de comenzar el ejercicio de una actividad empresarial o profesional". De esta manera, por ejemplo, un emprendedor que acaba de poner en marcha un negocio, que tiene muchos gastos y pocos ingresos, puede obtener con este sistema una mayor liquidez. Ya que supuestamente con REDEME, el autónomo no tendrá que esperar tanto tiempo para recibir sus devoluciones en el caso de que las liquidaciones le salgan en negativo.

Además su forma de acceder al sistema es relativamente sencilla. Los interesados deben presentar el modelo 036 y 039. Además deben cumplir los siguientes requisitos que establece la Agencia Tributaria:

  • No realizar actividades que tributen en el régimen simplificado.
  • Estar al corriente de sus obligaciones tributarias
  • No encontrarse en alguno de los supuestos que podrían dan lugar a la baja cautelar en el registro de devolución mensual o a la revocación del número de identificación fiscal.
  • No haber sido excluido del Registro en los 3 años previos al de presentación de solicitud de alta.

Las ventajas que puede suponer la utilización de REDEME, para los trabajadores autónomos son:

  • Obtener una mayor liquidez cuando el resultado de la declaración sea negativo
  •  La facilidad para detectar errores en las facturas y corregirlos con eficacia al realizar mensualmente la obligación
  • La posibilidad de descargar a las gestorías al no concentrarse el trabajo cada tres meses

Sin embargo, este sistema “lo utilizan muy pocos autónomos” aseguró el asesor fiscal de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Domingo Gallego.

En la práctica el REDEME “no funciona para los autónomos”

Gallego criticó que REDEME se vendió a los autónomos con una modalidad mensual de presentar el IVA más fácil, rápida y efectiva, “pero luego, en la práctica, ha resultado que esto no es así”. Según dijo el problema que tiene es que no se ha sabido adaptar a los pequeños negocios, “REDEME siempre ha existido en Hacienda pero lo utilizaban fundamentalmente dos sectores: las grandes corporaciones o las empresas exportadoras. Y hace unos años, también lo habilitaron para que pudieran utilizarlo también los autónomos, pero la mayoría no lo usa y ni sabe de su existencia” dijo.

REDEME, continuó Gallego, "le viene muy bien a las empresas exportadoras. Éstas hacen mucho uso de él porque como exportan sin IVA, pero compran con IVA, Hacienda se lo devuelve”. El problema de los autónomo reside en que la mayoría de ellos emiten facturas con IVA, por lo tanto no les sale a cuenta realizar la liquidación mensualmente.

Para este experto REDEME sería interesante para todos aquellos profesionales por cuenta propia que trabajen sin IVA, como por ejemplo los que prestan sus servicios en las obras y que por ley su servicios no llevan IVA. “A estos, como por ejemplo un señor que tiene una máquina excavadora, les sale rentable utilizar REDEME porque, si siempre emiten facturas sin IVA y sólo soportan el tributo cuando compran, al final van a poder deducirse el 100% del IVA soportado” aseguró el experto.

Cuando hay facturas con y sin IVA se hace un prorrateo

Sin embargo, son muy pocas las actividades que están exentas de IVA al 100%. Y es ahí cuando REDEME deja de ser rentable para los autónomos. Según el experto fiscal de ATA, “cuando un autónomo tiene en el mismo mes facturas con IVA y también sin IVA, se tiene la obligación de hacer la regla de la prorrata. Y ahí ya al autónomo puede que no le salgan las cuentas”.

La regla de la prorrata es un trámite obligatorio que deben hacer todos los trabajadores por cuenta propia cuando tengan facturas con y sin IVA, ya que sólo podrán deducirse el tributo generado por los gastos de su actividad y que corresponda con la parte de su actividad que esté sujeta al gravamen. De ahí la importancia que tiene la regla de la prorrata, pues permite calcular con exactitud cuánto puede deducirse un autónomo que realice a la vez trabajos sujetos y exentos de IVA.

Normalmente la fórmula general que se utilizar para calcular la prorrata de IVA en estos casos consiste, según la web jurídica especializada Iberley, en “calcular, para todos los bienes y servicios adquiridos, un único porcentaje de deducción tomando en consideración todas las operaciones efectuadas por el empresario”. Esto es, que el autónomo pueda deducirse un porcentaje de IVA soportado que sea igual al porcentaje que tiene de las ventas con derecho a deducir.

Tardanza y falta de tiempo

Entre las razones de por qué los autónomos no utilizan REDEME se encuentra también la tardanza de la Administración en efectuar la devolución de la liquidación. “Los autónomos que utilizan REDEME no obtienen la devolución de la liquidación de manera instantánea. Imagina uno que la haya presentado en noviembre, recibirá el pago a finales de enero e incluso febrero” criticó Gallego.

Por último, Gallego mencionó que los autónomos no pueden estar pendientes todos los meses de cumplir con esta obligación. “Casi no tienen tiempo para trabajar, pues tienen menos aún para cumplir con este trámite tan seguidamente. Por eso, y aunque pueda hacerse mensualmente, prefieren seguir realizándola cada tres”.