CETRAA asegura que se trata de una competencia desleal a miles de autónomos que cumplen la leyes

Denuncia: dos de cada diez talleres mecánicos en España actúan sin licencia y sin estar dados de alta

La Confederación Española de Talleres (CETRAA) ha denunciado que el 20% de los negocios de este sector no cuenta con los permisos ni el alta de actividad que sí cumplen el resto de los autónomos que se dedican a las reparaciones de vehículos en España. Piden mayor control a las administraciones públicas.

La patronal de los talleres denuncia que el 20% de los negocios actúan sin permisos ni estar dados de alta.
La patronal de los talleres denuncia que el 20% de los negocios actúan sin permisos ni estar dados de alta.
Denuncia: dos de cada diez talleres mecánicos en España actúan sin licencia y sin estar dados de alta

El 20% de los talleres en España son ilegales y clandestinos. Así lo aseguró la Confederación Española de Talleres (CETRAA), una denuncia que han hecho extensiva a la Federación Española de Municipios y Provincias para pedir la creación de nuevas vías para luchar contra esta competencia desleal.

Además, desde CETRAA recordaron que la existencia de estos talleres clandestinos, negocios que no están dados de alta ni cuentan con los permisos necesarios para operar que sí cumplen miles de autónomos dedicados a esta actividad, también suponen un riesgo “para la seguridad vial, el medioambiente, la seguridad industrial y la economía española en su conjunto, al tratarse de un sector con una facturación superior a los 12.000 millones de euros anuales y con más de 170.000 trabajadores.”

En este sentido, Guillermo Moreno, presidente de la Comisión de Ilegales de CETRAA, recordó que “estamos en un momento en el que se exige de cada negocio la máxima competitividad. Sin embargo, a la ya larga lista de obstáculos que encaran los talleres se ha de sumar la lacra de los clandestinos, lo que repercute negativamente en su viabilidad empresarial.”

La aparición de talleres ilegales no ha parado de crecer en los últimos años. Así, hace apenas cinco ejercicios, en 2019, la misma patronal cifraba la proporción de éstos en uno de cada cinco, un 10%. Unas prácticas cuyas pérdidas para el sector cifraron entonces en 4.000 millones de euros.

Dos de cada diez talleres mecánicos no cuentan con permiso de actividad ni está dado de alta

Desde CETRAA trasladaron a este medio que, según sus estimaciones, el 20% de los talleres mecánicos que permanecen abiertos en España son “ilegales y clandestinos”, al no contar con licencia de actividad ni estar dados de alta, tributando a Hacienda como el resto de los negocios.

Se trata de un problema que, en primer lugar, supone una competencia desleal con los autónomos dedicados a esta actividad, que sí pagan sus impuestos y cotizan a la Seguridad Social todos los meses. En este sentido, Guillermo Moreno afirmó que “el taller en particular, y la sociedad en general, necesitan que las diferentes instituciones trabajemos colaborativamente en la lucha contra este mal, que a todos nos afecta.”

En segundo lugar, la proliferación de estos talleres ilegales también supone un riesgo para la seguridad vial en las carreteras españolas, debido a los peligros “que implican para los usuarios de la vía pública el hecho de que haya coches mal reparados circulando”. Todo, además “del impacto medioambiental de los residuos tóxicos vertidos sin control” ni respeto a la legislación vigente, afirmaron desde CETRAA.

Los talleres clandestinos son más baratos que los legales, pero no tienen garantías

La patronal de los talleres mecánicos reconoció que muchos clientes ven en estos negocios una forma de abaratar el coste de las reparaciones que tienen que hacer a sus vehículos, teniendo en cuenta que “no pagan impuestos, ni cotizaciones sociales, ni aplican el 21% de IVA”. Sin embargo, valoraron que “terminan saliendo bastante más caros, no sólo por los precios que finalmente aplican, sino por las consecuencias de sus intervenciones”.

En este sentido, estos negocios, pertenecientes a la llamada economía sumergida, no tienen acceso a la formación, instalaciones ni herramientas apropiadas para llevar a cabo los trabajos. Además, “la práctica de estas actividades fraudulentas conlleva otros efectos negativos como son la limitación de los derechos de los consumidores en cuanto a garantía de la reparación, la ausencia de prevención en riesgos laborales o el peligro generado para la seguridad vial”, explicaron desde CETRAA.

La patronal cuenta con un canal de denuncias online que coordina con la Guardia Civil

Ante esta situación, la patronal de los talleres se reunió la pasada semana con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para solicitarle su apoyo y buscar nuevas vías de colaboración que luchen contra los talleres clandestinos.

Entre ellas, recordaron que disponen de un canal de denuncias a talleres clandestinos 100% digital, que desde hace un tiempo coordina con la Guardia Civil para que realice las inspecciones pertinentes y, en tal caso, aplicar las sanciones que correspondan, tanto en términos medioambientales como en los tributarios y laborales.

Según explicaron desde CETRAA, a través de esta herramienta se registran al año la existencia de más de 1.000 denuncias de talleres ilegales, una cifra que no para de crecer y que, como afirmaron, afectaría a uno de cada cinco negocios que se encuentran abiertos en España.

Hacienda vigilará este año la economía sumergida en algunos negocios

La denuncia de la patronal de los talleres, que representa a 20.000 negocios dedicados a esta actividad -el 70% del total de España- se ha producido de forma simultánea a la publicación del Plan de Control Tributario de Hacienda para 2024, en el que recogieron que la Inspección vigilará especialmente este año a los autónomos y empresas que puedan formar parte de la conocida como “economía sumergida”.

Se trata de una línea de actuación que viene siendo habitual en los últimos años, como demuestran los datos de la propia Agencia Tributaria. Así, en 2022 se afloraron 435 millones de euros, un 8,8% más que el año anterior, tras la realización de más de 2.300 actuaciones inspectoras realizadas en torno a la economía sumergida, de las cuales más de la mitad se hicieron a autónomo y negocios.

En concreto, este año Hacienda prestará especial atención a los locales y establecimientos que realicen un uso intensivo del efectivo y vendan productos o servicios destinados directamente al consumidor final. Por ejemplo, es el caso de los talleres mecánicos, cuyos clientes principales son particulares que tienen que reparar sus coches.

Sobre este asunto, el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, valoró hace unos días a este diario la importancia de estas acciones para aflorar la economía sumergida, que supone una "competencia desleal" para la mayoría de los autónomos y pequeños negocios que sí cumplen con sus obligaciones con Seguridad Social y Hacienda.