Acid test: ¿qué es el ratio de prueba ácida y cómo se calcula?

El ratio de prueba ácida o acid test es un indicador financiero que mide el nivel de liquidez de una empresa.
Acid test: ¿qué es el ratio de prueba ácida y cómo se calcula?
Acid test: ¿qué es el ratio de prueba ácida y cómo se calcula?

La prueba ácida, también conocida como Quick Ratio, Acid Test o Current Ratio es un ratio financiero que permite conocer la liquidez de una empresa u organización a corto plazo. 

A continuación te explicamos todo lo que debes conocer acerca de este concepto financiero: qué es, cómo se calcula y por qué puede servir para captar la atención de futuros inversores.

  1. Qué es el ratio de prueba ácida
  2. Cómo se calcula el ratio de prueba ácida
  3. Cómo interpretar el ratio de prueba ácida
  4. Ejemplo de ratio de prueba ácida
  5. Ratio de prueba ácida y de liquidez, ¿cuál es la diferencia?

Qué es el ratio de prueba ácida

El ratio de prueba ácida es una métrica financiera que calcula la capacidad de una organización para hacer frente y pagar sus deudas a corto plazo por medio de sus activos más líquidos.

Hasta aquí, podría parecer un concepto casi idéntico al del ratio de liquidez. Sin embargo, hay una gran diferencia entre ambos: en la prueba ácida se excluye el inventario, ya que puede haber agentes externos que impidan convertir los stocks en dinero rápidamente: una crisis económica, cambios en la legislación...

De esta forma, la prueba ácida ofrece una visión más conservadora y realista de la liquidez inmediata de la empresa.

Cómo se calcula el ratio de prueba ácida

Para realizar el cálculo del ratio de prueba ácida se utiliza la siguiente fórmula:

Ratio de prueba ácida = (Activo corrienteinventarios) / Pasivo corriente

A continuación te explicamos el significado de cada uno de los elementos:

  • Activo corriente. Se trata de los activos a convertir en efectivo en el corto plazo. Estas son las facturas y derechos por cobrar, el efectivo e inversiones a corto plazo.
  • Inventario. Lo compone el conjunto de bienes que la empresa ya tiene listos para vender, así como la materia prima, para producir nuevos bienes y servicios.
  • Pasivo corriente. Se trata de las obligaciones financieras que la empresa debe pagar en el corto plazo. En el pasivo corriente se inscriben los préstamos a corto plazo y las cuentas por pagar.

Cómo interpretar el ratio de prueba ácida

Una vez que realicemos el cálculo obtendremos un valor conocido como ratio de prueba ácida. En función de su valor se pueden sacar distintas distintas interpretaciones:

  • Acid Test > 1:

Cuando el ratio es mayor a 1, indica que la empresa tiene más activos líquidos que pasivos a corto plazo. Esto significa que la empresa tiene suficiente liquidez inmediata para cubrir deudas y obligaciones a corto plazo y que es posible afrontarlo sin necesidad de vender su inventario.

Se trata en general de una señal positiva, porque muestra a la empresa en una posición financiera saludable respecto a su capacidad de enfrentar obligaciones inmediatas.

  • Acid Test = 1:

Cuando el ratio es 1, esto implica que los activos líquidos de la empresa son iguales a sus pasivos a corto plazo. Con este resultado la empresa puede cubrir sus obligaciones a corto plazo, pero sin ningún margen de sobra.

Se trata de una situación neutral. Sin embargo hay que tener precaución y hacer controles sobre la liquidez de manera regular.

  • Acid Test < 1:

Cuando el ratio es inferior a 1, entonces significa que la empresa no tiene suficientes activos líquidos para pagar sus obligaciones a corto plazo sin depender de la venta de inventario o de financiación adicional.

Con este valor como resultado, se está frente a un signo de alarma. En el caso que se mantenga en el tiempo, es posible que surja un problema de liquidez.

El Acid Test no ofrece una visión completa de la salud financiera de una empresa. Por eso la valoración del ratio debe hacerse en el contexto de otros indicadores financieros, como así también la industria en la que opera la empresa y las condiciones económicas generales.

Ejemplo de ratio de prueba ácida

Para tomar dimensión del ratio de prueba ácida, se puede plantear un ejemplo ficticio de una empresa que tiene 100.000 euros de activo corriente, 37.500 en existencias y además un pasivo corriente de 40.000.

De esta manera, con estos números, el resultado e interpretación de la prueba ácida debe ser el siguiente:

  • PA = 100.000 – 37.500 / 40.000
  • PA = 62.500 / 40.000
  • PA = 1,56

La empresa, entonces, cuenta con 1,56 euros para responder por cada euro de deuda a corto plazo que posee. Por lo tanto se trata de una empresa que no tiene problemas para atender sus obligaciones a corto plazo y que no debería sufrir tensiones de liquidez. 

Si ese resultado fuese inferior a 1, la empresa tendría serias complicaciones hasta el punto de poner en riesgo su supervivencia por no contar con niveles de solvencia adecuados. Esos niveles son los que marcan la capacidad de la empresa de poder hacer frente a sus obligaciones de largo plazo o también llamadas estratégicas.

Ratio de prueba ácida y de liquidez, ¿cuál es la diferencia?

Cuando se habla de ratio de liquidez y la prueba ácida, se trata de dos indicadores financieros de los más utilizados para evaluar la capacidad de una empresa en relación a sus obligaciones a corto plazo.

Si bien ambos ratios están centrados en la liquidez, existen diferencias claves en su cálculo y en lo que representan.

En el caso del ratio de liquidez, el mismo incluye todo el activo corriente, como cuentas por cobrar, inventarios e inversiones a corto plazo, la prueba ácida excluye de este cálculo los inventarios. 

En cambio la prueba ácida ofrece una visión más conservadora y específica de la liquidez inmediata. Este resultado es útil en industrias donde los inventarios no se convierten rápidamente en efectivo.