Aumenta la necesidad de puntos de recogida de paquetes: los comercios cobran más de mil euros

Según refleja el último “Panel de Hogares sobre el sector postal y el comercio electrónico”, elaborado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el número de españoles que decide enviar sus compras online a puntos de recogida sigue aumentando de forma exponencial. Esta alternativa, además de beneficiar a los compradores y empresas de logística, puede llegar a suponer un beneficio económico para los negocios que se convierten en puntos de recogida.

Los ingresos que pueden obtener los autónomos que se unan a esta práctica no son fijos, ya que dependerán siempre del número de paquetes que se reciban. No obstante, las plataformas llegan a pagar más de 1.000 euros al mes. 

El número de personas que demandan este servicio se ha triplicado

“Su paquete no ha podido ser entregado, haga clic aquí para seleccionar otra fecha de entrega”. Así empiezan muchos de los correos electrónicos que a diario reciben todas aquellas personas que realizan compras online y que esperan impacientes la llegada de su compra. 

Desde hace unos años, para atajar este problema que tanto sobrecoste supone a los negocios de paquetería, empresas como Amazon, Aliexpress o, incluso, Correos, comenzaron a instalar taquillas en distintos comercios de España, como gasolineras. Otras empresas trajeron a España el concepto de “punto de recogida”, como Mondial Relay (ahora llamada Inpost) o Celeritas. 

Según el último estudio elaborado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la situación actual del sector postal y el comercio electrónico, “está aumentando el número de españoles que opta por recoger los paquetes que compra online en otras tiendas distintas a las del vendedor”. 

Es decir, los usuarios que compran a través de internet cada vez reclaman más puntos de recogida. Y los autónomos pueden encontrar una gran oportunidad en esta nueva forma de envío de paquetería. 

De hecho, tal ha sido el alcance de esta práctica, que, según el informe elaborado por la CNMC, “el indicador se ha triplicado desde 2020, llegando a ser la opción elegida por el 15,3% de los encuestados”. Si bien es cierto que todavía la gran mayoría escoge recibir su paquete en casa, no hay duda de que el envío de paquetes a puntos de recogida es una práctica que está ganando terreno.  

Los puntos de recogida benefician al comprador, pero también a los negocios 

Según la CNMC, más de la mitad de los españoles compra a través de internet y, en consecuencia, “el comercio online sigue haciendo crecer la importancia de la paquetería dentro del sector postal”. De hecho, explicó, “la mayoría de estas compras implican la recepción de algún paquete (94,8%)”.

Sin embargo, las largas jornadas de trabajo, los viajes de negocios o las tareas cotidianas hacen que, en muchas ocasiones, los paquetes no puedan ser entregados. Motivo por el que las empresas de paquetería se las han ido ingeniando para buscar nuevas maneras de mejorar el proceso de recepción de paquetes. 

Una de estas formas ha sido la utilización de puntos de recogida, que son lugares ubicados en distintas zonas de la ciudad donde los usuarios pueden recoger su paquete con un horario mucho más amplio. Por un lado, los compradores pueden escoger cuándo recoger su paquete -dentro de un determinado tiempo- y, por otro lado, las empresas de logística no se encuentran con los problemas y costes derivados que implica ir a entregar un paquete y que la puerta no sea abierta. 

No obstante, estas dos partes no son las únicas que pueden sacar un beneficio de ello. Normalmente, las tiendas de barrio o pequeños negocios suelen ser las favoritos por las empresas de paquetería para instalar puntos de recogida, ya que se encuentran situadas en zonas estratégicas y a pie de calle, dos aspectos que tienen muy en cuenta a la hora de aceptar la solicitud de ser punto de recogida.

Los negocios pueden incrementar sus ingresos hasta en más de 1.000 euros

Los ingresos que pueden llegar a percibir los autónomos que ofrezcan un servicio de recogida en su negocio dependen del número de paquetes que se recibidos y del tamaño de los mismos. Según explicaron a este diario desde la empresa Mondial Relay, cuyo nombre ahora es Inpost, “el pago por paquete puede oscilar entre 0,30 y 1,5 euros”. A partir de ahí, el dinero que perciban por parte de la empresa de paquetería podría ser de cientos o incluso miles de euros. 

Según aclararon, “la diferencia en el precio la marca el peso del paquete”. Cuanto mayor sea el peso y el tamaño, mayor será el beneficio. De media, los locales adheridos que se encuentran en puntos estratégicos donde la afluencia de personas es elevada, podrían llegar a percibir ingresos de hasta más de 1.000 euros, ya que llegan a recoger más de 100 paquetes diarios. 

Si un negocio recogiera 100 paquetes al día durante los cinco días de la semana, querría decir que al mes recogería 2.000 paquetes. Si todos esos paquetes fueran de gran tamaño y, por tanto, el precio de cada uno de ellos fuera de 1,5 euros, los ingresos totales mensuales serían de 3.000 euros. No obstante, este ejemplo muestra un escenario utópico. Ya que si, por el contrario, fueran paquetes pequeños, las ganancias serían de 600 euros. 

Dado que a lo largo del mes, tanto el número de paquetes que se reciben al día varía, así como también lo hace el tamaño de los paquetes, se podría hablar de una media, aproximada, de entre 900 y 1.000 euros, dependiendo, evidentemente, de cada negocio y de la ubicación del mismo. 

“Llevamos ya varios años recogiendo paquetes en nuestro local. En nuestro caso, recogemos paquetes a través de Inpost, que provienen o de Vinted o de Shein”, explicó a este diario una autónoma que regenta una tintorería en un municipio al oeste de la Comunidad de Madrid. 

“A nosotros nos merece mucho la pena ofrecer este servicio de recogida de paquetes, ya que al día pueden venir entre 20 y 30 personas a recoger algún paquete. Es cierto que cada paquete nos quita tiempo de trabajo, pero no son más de tres o cuatro minutos. cuando vienen tenemos que identificarles, buscar el paquete correspondiente y registrar la recogida con un código que ellos reciben. Nos merece la pena, porque al final forma parte de nuestros ingresos. Lo vemos como una tarea diaria más. Tenemos un mueble habilitado para la recogida de paquetes y nunca está vacío. Hemos llegado a tener que colocar paquetes en el suelo porque ya no nos cabían más”, explicó la autónoma a este diario.

Este servicio puede atraer nueva clientela y potenciar las compras 

Pero convertirse en un punto de recogida puede también suponer beneficios económicos de forma indirecta, gracias al aumento del tráfico de posibles clientes que puede atraer el hecho de ofrecer este servicio. 

“Además de los ingresos extra que percibimos cada mes por ofrecer este servicio de recogida de paquetes online, es verdad que desde que lo hacemos hemos notado que más gente nos conoce y nos preguntan por nuestros servicios. Nos ha servido para tener más ingresos al mes, pero también para atraer clientes nuevos. Al final, trabajamos en un pueblo de no más de 10.000 habitantes y muchos nos conocen, pero también recogemos paquetes de personas que viven en urbanizaciones o pueblos cercanos y eso ayuda a que nos conozcan y vuelvan después”, concluyó la emprendedora. 

De hecho, tal y como explicaron las empresas distribuidoras, un establecimiento que ponga a disposición un servicio como este podría ver un incremento en sus ventas de entre el 12% y el 20%. En este contexto, EL portavoz y tesorero de la Confederación Española de Comercio (CEC), Carlos Moreno, aseguró que este servicio les ofrece alternativas a su actividad comercial principal y potencia las compras en los negocios de proximidad", explicó.