Una sentencia recuerda al Fisco que debe mirar también lo que beneficia al contribuyente

El Supremo obliga a Hacienda a favorecer también a los autónomos cuando regulariza sus impuestos

Una reciente sentencia del Tribunal Supremo obliga a Hacienda, cuando realiza una regularización a un autónomo, a corregir los fallos que favorecen a la Administración pero también a aplicar todo aquello que puede beneficiar al contribuyente.
autonomos-irpf (1)
El Supremo obliga a Hacienda a favorecer a los autónomos cuando regulariza sus impuestos
El Supremo obliga a Hacienda a favorecer también a los autónomos cuando regulariza sus impuestos

El Tribunal Supremo ha recordado a Hacienda que las regularizaciones que efectúe la Inspección a los autónomos no sólo deben corregir los fallos que benefician a la Administración, sino también los errores que favorecen a los trabajadores por cuenta propia. Una reciente sentencia del Alto Tribunal ha insistido en la importancia de aplicar el "principio de regularización íntegra", que a pesar de toda la jurisprudencia que ha habido hasta la fecha, Hacienda sigue sin aplicar cuando corrige las declaraciones de los contribuyentes.

Hasta la fecha, cuando Hacienda hace una comprobación y detecta un error en las declaraciones de impuestos -ya sea IVA, IRPF o cualquier otro tributo- de los autónomos, corrige automáticamente el error que le está generando un perjuicio económico a la Administración pero deja sin regularizar la parte de ese mismo fallo que favorece al contribuyente. Según explicó José María Salcedo, abogado especialista en Derecho tributario y socio-director del despacho Salcedo Tax Litigation, "ésta es una actuación muy habitual por parte de la Administración. Cuando el contribuyente incluye una deducción de un gasto en un ejercicio incorrecto o tributa por unos ingresos en el impuesto que no es, Hacienda corrige este error y hace pagar al autónomo, pero no regulariza de oficio lo que haya podido pagar de más este mismo contribuyente al cometer ese fallo". 

El ejemplo más claro, según explicó este mismo abogado, es el caso que trata la propia sentencia emitida el 28 de febrero de este año por el Tribunal Supremo. En él, el negocio en cuestión incluyó los ingresos de unos informes de auditoría en el ejercicio 2012, en vez de en 2011. Hacienda hizo una comprobación y regularizó este error cometido por la empresa, haciéndole tributar por estos mismos informes en 2011.  El problema es que la Administración corrigió el fallo e hizo pagar más al contribuyente en 2011, pero dejó sin tocar la declaración de 2012, "por lo que la empresa paga dos veces por el mismo hecho imponible", explicó el socio-director de Salcedo Tax Litigation. 

Los autónomos tienen derecho a que Hacienda también corrija los errores a su favor en las regularizaciones

Según explicó José María Salcedo, lo que viene a reconocer el principio de "regularización íntegra" es que "cuando Hacienda regulariza algo que afecta no sólo a lo que está corrigiendo sino también a otros ejercicios o impuestos, subsane de oficio todos los fallos que afectan a esa comprobación, tanto los que favorecen a la Administración, como los que benefician al autónomo".

Esta problemática suele ocurrir de dos maneras distintas. Por un lado, puede darse el caso de que Hacienda detecte que un ingreso se ha tributado en un impuesto incorrecto, y decida hacer una paralela con ese ingreso incluido en el tributo correcto, pero sin corregir la tributación que se ha hecho de forma irregular. El segundo caso es que se aplique, por ejemplo, un ingreso o una deducción en el ejercicio incorrecto y que la Agencia Tributaria lo pase al año correcto, pero sin corregir la tributación que ya se ha efectuado. En ambos casos el resultado es una doble tributación por parte del contribuyente.

La regularización íntegra evita que los autónomos tengan que reclamar luego los ingresos indebidos a Hacienda

Lo que debería hacer Hacienda, según el principio de "regularización integra", es corregir de oficio tanto lo que perjudica como lo que beneficia al autónomo. Esto, sin embargo, "no es lo que suele ocurrir. Cuando un contribuyente, por ejemplo, tributa un ingreso en el impuesto equivocado, Hacienda suele ver rápido el error y corregirlo para que tribute correctamente pero deja como está el tributo que ya se ha pagado. Por lo tanto, el contribuyente tiene que iniciar un procedimiento para recuperar esos ingresos indebidos que se han generado tras la comprobación de la Agencia Tributaria".

Lo que ha hecho el Supremo es recordar que la Administración está obligada a corregir este desajuste de oficio y evitar que el autónomo tenga que iniciar un procedimiento aparte para recuperar los ingresos que pagó de manera errónea. Según esta sentencia del Supremo, este "principio de íntegra regularización, que reiteradamente hemos reconocido, es aplicable a los supuestos en los que se comprueba por la Administración un hecho imponible -la emisión de informes de auditoría-, imputándolo al ejercicio que corresponde, sin tener en cuenta que el contribuyente ya había satisfecho el importe de la deuda".

Pero además, recuerda el Alto Tribunal, "este principio, en su vertiente procedimental, es aplicable no sólo a los procedimientos de inspección sino también a los procedimientos de gestión tributaria, incluido el de comprobación limitada,  sin que sea admisible remitir al contribuyente para obtener la devolución de la cantidad doblemente percibida a un procedimiento nuevo de rectificación de la autoliquidación y devolución de ingresos indebidos totalmente innecesario y contrario a los principios de eficacia, economía y proporcionalidad en la aplicación de los tributos".