Los autónomos que solicitaron un crédito ICO van a pagar más este otoño por el fin del periodo de carencia

En los últimos meses muchos autónomos han pasado de tener que pagar 161 euros al mes, a tener que afrontar un pago de 1.518 euros mensuales por la devolución de los préstamos avalados por el Instituto de Crédito Oficial (ICO) que han venido solicitando desde 2020. Otros habrán pasado de 183 euros al mes, a tener que abonar 2.184 euros al mes. E, incluso, algunos habrán notado un incremento de 473 euros a 4.344 euros.

Aunque las cifras variarán en función de cada caso particular, todos los cambios se originaron por el mismo motivo: el fin del periodo de carencia de los créditos ICO avalados por el Estado durante la pandemia, y el comienzo del periodo de amortización de los mismos. Los expertos advirtieron sobre las dificultades que tendrán muchos negocios, con la inflación, para hacer frente a la devolución de estos préstamos.

Desde que el Gobierno pusiera en marcha en mayo de 2020, las Líneas de Avales de Liquidez e Inversión, a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO), cientos de miles de autónomos y pequeños negocios se animaron a solicitar un crédito avalado por el Estado para poder disponer de liquidez y hacer frente a las dificultades que la emergencia sanitaria les estaba ocasionando. En total, se han emitido 107.102 millones de euros de aval público, que han permitido movilizar 140.627 millones de euros en financiación hacia el tejido productivo hasta el pasado mes de mayo. Un dinero que ahora toca devolver.

Los préstamos del ICO avalados por el Gobierno tienen dos fases: un periodo de carencia, dónde los autónomos sólo hacen frente al pago de los intereses. Y un segundo, denominado periodo de amortización, en el que se abona una cuota mayor para devolver el importe del crédito solicitado. Ambos plazos han sido modificados en múltiples ocasiones durante los últimos dos años. Sin embargo, para la mayoría de los créditos ICO solicitados por autónomos el periodo de carencia ha finalizado ya o está a punto de hacerlo, como informaron fuentes del Instituto.

Según explicaron, “para la mayoría de las operaciones el periodo de carencia ha ido finalizando a lo largo del segundo trimestre de 2022. De hecho, el Banco de España estimó que en junio de 2022 finalizaría casi el 90% de los préstamos que estaban en periodo carencia”. Esto significa que los autónomos, en función del préstamo solicitado, han pasado o van a pasar de tener que devolver al rededor de cien o cuatrocientos euros a entre 1.000 euros, 4.000 euros o, incluso más para hacer frente a la devolución del crédito durante periodo de amortización.

El 10% restante que sí paga carencia

Aunque la mayoría de los autónomos deberían estar ya pagando el periodo de amortización, hay un  porcentaje, alrededor del 10%, que todavía estaría disfrutando de un periodo de carencia. Esto puede ser por dos razones: la primera, porque pertenece a uno de los cuatro sectores beneficiados en marzo de un nuevo periodo de carencia o, la segunda, porque consiguió una reestructuración de la deuda negociando con su banco.

Los autónomos de los cuatro sectores

En marzo, el Gobierno permitió a cuatro sectores de actividad: agricultura, ganadería, transporte y pesca, ampliar durante seis meses más el plazo de carencia de los préstamos que hubieran solicitado al ICO. Este periodo se le añadía siempre y cuando lo solicitasen. Por ejemplo, si un agricultor tenía todavía dos meses de periodo de carencia en el momento en el que se aprobó y lo solicitó a su banco, se le concedían seis meses más. Tendría entonces ocho meses de periodo de carencia.

Ahora bien, si no tenía ningún mes de carencia o estaba próximo a agotarse, se le daban seis meses adicionales. Esto significa que este septiembre se le acabaría el periodo de carencia, pues lo haría solicitado en marzo.

Los autónomos que reestructuraron la deuda negociando con su banco

Hasta el pasado 30 junio de 2022, los autónomos podían sentarse con la entidad bancaria a la que solicitaron el crédito ICO y negociar una reestructuración del préstamo avalado por el Estado. La diferencia, entre un motivo u otro, es que para los autónomos de los cuatro sectores mencionados el banco estaba obligado por ley a aceptar esos seis nuevos meses de carencia, mientras que en esta segunda posibilidad las entidades bancarias tenían libertad de decisión. Es decir, podían aceptar o no una reestructuración de la deuda y, por tanto, la aplicación de nuevos periodos de carencia.

Esta medida estaba recogida en el Código de Buenas Prácticas, pero terminó porque finalizó la vigencia del marco temporal de las Ayudas de Estado de la Unión Europea por las que se regía la línea, según señalaron desde el ICO.

Ahora sólo se puede hacer una reestructuración de la amortización

Con la mayoría de los plazos de carencia acabándose y con muy pocas probabilidades de que se apruebe una nueva extensión, los trabajadores por cuenta propia sólo tienen una medida a la que poder acogerse para obtener mejores condiciones en la devolución de su crédito ICO y es alagar los periodos de amortización.

Esta iniciativa fue aprobada por el Consejo de Ministros a finales de junio y validada por la Unión Europea pocos días después. Según explicaron fuentes del ICO, “lo que se aprobó en junio fue la posibilidad de que las empresas y las entidades pudieran acordar extender el periodo de amortización de las operaciones, siempre que no se superaran los límites que se habían establecido en el marco temporal de una operación”. Esto es hasta ocho o diez años en función del préstamo.

Si bien, desde el ICO recordaron que son las entidades financieras quiénes podrán aceptar o rechazar la solicitud. Ya que está en sus manos querer permitir una reestructuración de la deuda o no.

Los expertos dudan que muchos autónomos puedan pagar

Aunque desde el ICO aseguraron que las empresas están pagando y cumpliendo con los plazos de devolución de los préstamos avalados, "los bancos dijeron en junio que la cartera de crédito avalado se está comportando bien y están haciendo frente al pago de sus operaciones con normalidad", añadieron fuentes de esta entidad. Lo cierto es que los expertos se muestran preocupados y advirtieron de las dificultades de muchos negocios a la hora de pagar la amortización de los ICO.

El profesor de EAE Business School, Juan Carlos Higueras, aseguró que muchos autónomos no van a poder hacer frente a la devolución del préstamo porque su negocio no se ha recuperado de la pandemia. Además, comentó el grave problema que supone la inflación para muchas de estas actividades. “La inflación se está comiendo a unos negocios más que otros” dijo.

Por su parte, el economista y asociado al bufete AGM Abogados en las áreas de Corporate Finance y Gestión de Crisis, Luis Fernando Conde, aseguró que muchos negocios están en la cuerda floja. Conde admitió conocer a varios trabajadores por cuenta propia que "se están reuniendo con sus bancos para reestructurar la deuda por temor a no poder hacerle frente este otoño”.

Ambos expertos coincidieron en el hecho de que muchos de los autónomos que solicitaron un ICO avalado por el Estado durante la pandemia acabarán abriendo un concurso de acreedores próximamente.