Hay 20.000 profesionales menos en estos sectores que en 2022

El Comercio y la Agricultura no paran de perder autónomos: las asociaciones explican las causas

Este año hay 20.000 autónomos menos dedicados al Comercio y la Agricultura que el año pasado. Los negocios no pueden asumir los costes salariales y existe un gran problema de relevo generacional, explicaron las asociaciones.

El Comercio y la agricultura no paran de perder autónomos: las asociaciones explican las causas.
El Comercio y la agricultura no paran de perder autónomos: las asociaciones explican las causas.
El Comercio y la Agricultura no paran de perder autónomos: las asociaciones explican las causas

Actividades como el Comercio y la Agricultura llevan tiempo en caída libre. Así lo demuestran los últimos datos de afiliación al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), correspondientes a julio, en los que se aprecia una reducción de más de 20.000 autónomos dedicados a estas actividades en el último año.

Se trata de una situación preocupante, debido a que se trata de sectores que tradicionalmente han sido pilares de la economía española, junto a la hostelería. Ante esta situación, los economistas explicaron a este diario que la ralentización en el crecimiento del PIB podrían deberse al cierre de miles de negocios.

El incremento de los costes, la falta de relevo generacional o el bajo importe de las ayudas directas aprobadas por el Gobierno son las principales causas que las asociaciones sectoriales identificaron como motivos del deterioro de esta parte del tejido empresarial. Según valoraron a este diario, la situación podría, incluso, empeorar en los próximos meses si el nuevo Gobierno no toma medidas al respecto.

Al finalizar julio, 1,2 millones de autónomos estaban dedicados al Comercio, la Industria y la Agricultura. Se trata de unos 24.000 menos que hace un año. Por sectores, las actividades comerciales son las que más se han resentido en el último año, con una caída interanual del 2,4%, según los datos recogidos por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA).

Las ayudas a la agricultura no funcionan y hacen falta autónomos jóvenes

La Agricultura ha sido una de las actividades que más profesionales autónomos han perdido en el último año. En concreto, a finales de julio 2.500 autónomos habían abandonado sus explotaciones agrarias si se tiene en cuenta el número de agricultores que había en el mismo mes del año pasado. Tal y como explicaron desde la Asociación de Jóvenes Agricultores y Ganaderos (Asaja), la situación podría seguir empeorando en los próximos meses.

Para su secretario de organización, Juan José Álvarez, los agricultores “están abandonando muchas explotaciones debido al innumerable número de trabas que están teniendo, algunas de ellas anteriores a la pandemia.” Por ejemplo, con respecto a los precios que cobran por sus productos, un problema que no se ha solucionado tras la entrada en vigor de la Ley de la Cadena Alimentaria.

Por otro lado, “la reforma laboral también ha afectado mucho a las contrataciones, porque todos los asalariados tienen que ser indefinidos o fijos discontinuos. Ante esta situación y la escasa rentabilidad de las explotaciones, muchos autónomos están viéndose obligados a abandonar la actividad.”

Ante esta situación, los agricultores y ganaderos denunciaron que las ayudas directas puestas en marcha en los últimos meses para paliar los efectos de la sequía y la guerra de Ucrania son insuficientes. “Por ejemplo, el último plan de ayudas para agricultores y ganaderos está dotado con 712 millones de euros, frente a los 10.000 millones que hay de pérdidas.”

Además de estos problemas, el secretario de organización de Asaja mencionó otro problema que podría traducirse en una pérdida aún mayor para el sector en los próximos años: la falta de relevo generacional. “Hay que hacer políticas para que los jóvenes se incorporen al campo y haya un relevo generacional, porque a este paso lo más probable es que el campo se quede vacío”, explicó Juan José Álvarez a este diario.

El comercio lleva varios años en caída libre por la falta de relevo y el exceso de regulación

El Comercio es la actividad donde más se está notando la caída del número de afiliados al RETA entre julio de este año y el mismo mes de 2022. En la actualidad hay alrededor de 18.000 autónomos menos en el sector, un 2,4% menos que en el séptimo mes del ejercicio pasado. Sin embargo, el número de asalariados ha aumentado unos 65.000, demostrando que "el autónomo es el que está sufriendo", señaló a este diario Rafael Torres, presidente de la Confederación Española de Comercio (CEC).

"Somos el eslabón más débil de la cadena, y se espera que el sector siga cayendo debido a la caída de la demanda que se espera para los próximos meses", explicó Rafael Torres. Esta bajada en el número de autónomos, según señaló, se concentra en su mayor parte a los pequeños comercios dedicados a la alimentación y al textil. "No pueden competir con las grandes superficies ni en precio ni en la capacidad de llegar a los consumidores. Al final, los autónomos sufren más."

Como principales motivos de esta caída, Rafael Torres identificó la falta de relevo generacional, que también sufren otras actividades como la agricultura. “Tiene que ver con la sensación que está trasladando el pequeño comercio. No es atractivo para que alguien joven decida coger un negocio, adaptarlo y modernizarlo a los nuevos modelos y hábitos de consumo”, valoró a este diario.

Además, el exceso de regulación que sufren los autónomos del pequeño comercio está haciéndoles muy difícil la competencia con el comercio electrónico, donde existen menos normas. Así, desde la CEC recordaron que estos negocios están sujetos a unas 3.000 normas diferentes. “No puede ser que unos vayamos por un camino de tierra y otro vayan por una autopista de cuatro carriles sin límite de velocidad. Tenemos que competir con las mismas reglas”, valoró Rafael Torres.

Para solucionar estos problemas, el presidente de la CEC pidió al Gobierno que "dejen de tener buenas palabras y pasar a buenos hechos", tratando mejor fiscalmente a los autónomos. "No se puede subir los impuestos a todos por igual, porque los trabajadores por cuenta propia y pequeños negocios son los que más están sufriendo", concluyó Rafael Torres.

El aumento de costes y los salarios están ahogando a los autónomos y microempresas, según los economistas

Tal y como explicó a este diario el presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas (CGE), Antonio Pedraza, la caída del número de autónomos en sectores tan estratégicos como la agricultura o el comercio ha tenido una evidente relación con la ralentización del crecimiento del PIB en los últimos meses. En este sentido, entre abril y junio “se esperaba crecer en un 0,6% y finalmente ha sido del 0,4%, por debajo de las expectativas”, valoró.

Atendiendo a los problemas que están experimentando los autónomos y los negocios más pequeños, Antonio Pedraza destacó varios factores que están “ahogando” a los trabajadores por cuenta propia. “Por un lado, el incremento de los costes de la energía; y el crecimiento de los costes salariales con el nuevo SMI, ya que en estas actividades se suele pagar a los empleados según el salario mínimo”, explicó.

Además, “la subida de los tipos de interés que los autónomos y pequeños negocios están pagando por sus préstamos también está complicando su actividad”, recordó el presidente de la Comisión Financiera del CGE. Todo, sin contar con el acceso a la financiación, “que se está resintiendo entre las pymes debido a que las entidades bancarias están viendo que muchas empresas no son viables en el momento actual”, concluyó a este diario Antonio Pedraza.