Los ingresos de los autónomos ya están cayendo: en mayo facturaron un 2,7% menos que hace un año

La ralentización del crecimiento de la economía española es un hecho cada vez más sustentado por las cifras. Así lo mostró el último Índice General de Cifra de Negocios Empresarial (ICNE), elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que mostró una caída de las ventas de los negocios españoles del 2,7% interanual en mayo. Se trata de la segunda vez consecutiva que este indicador se encuentra en negativo desde 2020, el año de la pandemia.

El ICNE muestra la evolución de las ventas de los negocios y autónomos españoles, excluyendo a las empresas dedicadas a los servicios financieros. Así, su análisis supone un buen indicador para determinar el momento por el que están atravesando las empresas españolas, según valoraron a este diario los economistas.

La publicación del ICNE de mayo ha coincidido con los últimos datos disponibles sobre las exportaciones de los negocios españoles, que también han sufrido una caída importante en el último mes después de haber servido para sostener la economía española.

Ante esta situación, los economistas anticiparon a este diario que las ventas podrían seguir cayendo en los próximos meses. Pese a ello, consideran que el año finalizará con un crecimiento de la economía, aunque los malos resultados podrían llegar, como “efecto tracción”, a comienzos de 2024.

Las ventas de los negocios españoles cayeron en mayo por primera vez desde la pandemia

Tal y como mostró el Índice General de Cifra de Negocios Empresarial (ICNE), las ventas de los negocios españoles se redujeron en mayo un 2,7%, acumulando dos meses consecutivos de caídas interanuales. Se trata de la primera vez que ocurre en el quinto mes del año desde 2020, el ejercicio de la pandemia, y podría significar una reducción de los ingresos de los autónomos y negocios en el cómputo del año.

Para Antonio Pedraza, presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas (CGE), el dato del ICNE “es algo negativo, y es síntoma claro de ralentización de la economía, principalmente por un motivo muy evidente: los precios de los productos y servicios que venden los negocios son más elevados ahora que hace unos años por la inflación.”

Así, pese a que muchos negocios han incrementado sus precios de venta para poder compensar la caída de sus márgenes, sus ingresos llevan dos meses en caída libre: un 2,5% en abril pese a la temporada de Semana Santa y un 2,7% interanual en mayo.

Por sectores de actividad, en mayo sólo se apreció un crecimiento interanual de las ventas en los servicios de mercado no financieros, donde se encuentran actividades vinculadas al turismo, como la hostelería o el alojamiento hotelero, así como el Transporte. Por el contrario, los ingresos del comercio cayeron un 1,3%; en el caso de la Industria, las ventas fueron un 3,6% inferiores a las de mayo del año pasado.

Según explicó a este diario Antonio Pedraza, las bajas cifras de ingresos de estos negocios continuarán en los próximos meses. En este sentido, en los indicadores que muestran las perspectivas de venta -PMI- se aprecia una considerable caída de las previsiones, “tanto en el sector servicios como en el manufacturero. El crecimiento ya se está reduciendo, y lo hará más en los próximos meses”, anticipó el presidente de la Comisión Financiera del CGE.

• Las ventas crecieron en mayo un 0,3% con respecto al mes anterior

En términos mensuales, las ventas de los negocios españoles crecieron en mayo un 0,3%, según el ICNE. Aunque se trata de una cifra positiva, es el peor dato de crecimiento de los últimos dos años en este mes, otro factor que muestra la ralentización de la actividad sobre la que alertaron los economistas.

Las exportaciones caen en el último mes y las perspectivas para el año que viene son negativas

El Índice General de Cifra de Negocios Empresarial seguirá cayendo en los próximos meses, según los economistas, y podría provocar un negativo “efecto tracción” durante el primer trimestre de 2024. Así los explicó Antonio Pedraza, apoyándose en los últimos datos de exportaciones -negativos para España- y la notable caída del consumo que se espera cuando finalice la temporada turística.

Así, las exportaciones, que fueron una importante fuente de ingresos para los negocios españoles en la primera mitad del año, cayeron en junio un 4,1%, algo que ocurrió por primera vez en los últimos meses. “Es una caída muy fuerte y una señal de alarma, porque tiene mucha relación con lo que ocurre en el resto de economías europeas, como Reino Unido, Alemania o Francia”, explicó Antonio Pedraza.

Además, la caída del consumo de los españoles en los últimos meses se agravará en la última parte del año, debido al incremento de los tipos de interés aprobados por el Banco Central Europeo (BCE), por lo que las ventas de los autónomos y negocios podrían seguir reduciéndose. “La tendencia es que el ICNE seguirá en negativo durante los próximos meses”, valoró el presidente de la Comisión Financiera del CGE.

Los economistas han mejorado sus previsiones de crecimiento para la economía española este año, hasta el 2,3%. Sin embargo, Antonio Pedraza recordó que “no hay que lanzar las campanas al vuelo, porque vamos a vivir un último trimestre muy delicado.” Sin embargo, “sin las exportaciones y con la demanda interna por los suelos, tendremos una caída del crecimiento que no se va a notar en el cómputo total del año, pero tendrá un ‘efecto tracción’ sobre los primeros meses del 2024”, explicó Antonio Pedraza.

Por último, como único factor positivo para los negocios españoles, el presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas expuso la relativa bajada del endeudamiento de los autónomos y particulares “por el peso de los tipos de interés. Muchos están prefiriendo amortizar una parte importante de sus préstamos ante la perspectiva de que estos tipos sigan creciendo”, concluyó.