PIMEM pide bajar el IVA de las clínicas veterinarias con ocasión de la presidencia española de la UE
Los autónomos veterinarios que se dedican a los animales de compañía son los únicos sanitarios que soportan un IVA del 21%. La patronal de la pequeña y mediana empresa de Mallorca ha solicitado una rebaja del impuesto para el sector.
La Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (PIMEM) ha presentado una propuesta de la bajada del IVA veterinario, que en estos momentos es del 21%, con ocasión de la Presidencia Española de la Unión Europea. Es una ya una histórica reivindicación de este importante colectivo, que tiene repercusiones sanitarias en animales y personas, porque, si el coste de este servicio sanitario es alto, repercute en una disminución del control de enfermedades zoonóticas transmisibles al ser humano, aseguran los profesionales.
En las Propuestas a la Presidencia Española de la Unión Europea que ha redactado la Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (PIMEM), ante la Delegación del Gobierno de las Islas Baleares, se pide que Europa sitúe "en el centro de sus políticas a las micro, pequeñas y medianas empresa (pymes), que son más de 24 millones en toda la UE, y emplean a unos 150 millones de personas. El 67% del empleo y el 60% del PIB europeos dependen de las pymes". Por lo que "La presidencia española debería ampliar la lista de sectores previstos en el Anexo III de la Directiva del Impuesto sobre el Valor Añadido (Directiva 2006/112/CE), a los cuales se permiten aplicar tipos de IVA reducidos. La última modificación de la Directiva, en diciembre de 2021, olvidó algunos ámbitos como los servicios veterinarios".
Actualmente, el IVA que se aplica en las clínicas veterinarias de animales de compañía es el general, del 21%, aunque a aquellos prestados a titulares de explotaciones ganaderas disfrutan de un tipo reducido del10%. “Esto supone que, en la actualidad, los veterinarios de animales de compañía son los únicos sanitarios que soportan un IVA del 21%. Por lo tanto, no sólo se estaría hablando de reducir este impuesto al 10%, sino también de un reconocimiento de las clínicas veterinarias como centros sanitarios”, puntualiza Marcos Cañabate, gerente de la Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca.
Esta es ya una antigua y continua reivindicación de los veterinarios clínicos de animales de compañía, porque desde la reforma fiscal del 1 de septiembre de 2012 tienen que acogerse a este tipo general de IVA. Esto supuso un incremento de trece puntos para los profesionales y “un lógico descenso en el número de visitas al veterinario por parte de los dueños de las mascotas, lo que lleva a un mayor abandono de animales de compañía”, como explica Marcos Cañabate.
La salud de las personas está también en manos de los veterinarios
Las consecuencias de un buen trato fiscal para los veterinarios son sanitarias porque afectan a la salud de los animales y, por tanto, también de los dueños de las mascotas además de que, el riesgo de que un alto coste de estos servicios, puede hacer que disminuya el control de enfermedades zoonóticas transmisibles al ser humano, algo que en estos momentos es de vital importancia. Los expertos señalan el riesgo de un posible aumento de enfermedades transmitidas por animales como la rabia, la sarna, la tuberculosis o la hidatidosis, entre otras, además de la posible falta de desparasitación, si los dueños de las mascotas no acuden a las clínicas debido a su alto coste. Y hay que tener en cuenta que los veterinarios llevan a cabo la inspección de los alimentos, el control de puestos fronterizos y un desarrollo en I+D que evita diariamente intoxicaciones o epidemias.
Los veterinarios siempre han insistido en que su labor interesa, y mucho, a la salud de los animales y a la prevención de cara a las posibles enfermedades que éstos puedan contraer y transmitir al conjunto de la población, sin embargo, se quejan de que aún no están incluidos en el Sistema Nacional de Salud (SNS). Al estar fuera de este sistema, no pueden acceder a ninguna especialidad sanitaria, ni tampoco a las relacionadas con la salud pública. Estas especialidades son las conocidas como residencias, que se llevan a cabo en hospitales, entre las que destaca la de Médico Interno Residente (MIR) o Enfermero Interno Residente (EIR), y son las que permiten a los profesionales de la salud y de la sanidad trabajar en los centros sanitarios públicos españoles.
La bajada del IVA de los veterinarios se sacó de los Presupuestos Generales del Estado
La primera vez que se contempló este asunto en los Presupuestos Generales del Estado fue en 2019, pero no salió adelante. En el año 2020 no se abordaron los PGE a causa de la pandemia provocada por el coronavirus, y en los tres siguientes no se reparó en ello. Así pues, desde hace varios años, el IVA veterinario se ha quedado fuera de los Presupuestos Generales del Estado.
“Según datos que constan en la Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca −añade Ramón Cañabate−, en las islas Baleares hay censadas 188 clínicas veterinarias, de las casi 7.000 que existen en España, con un perfil de pequeño negocio y autónomos que ejercen por cuenta propia, son microempresas de menos de cinco trabajadores”.
