Pondría en peligro los medios de vida del campo y la producción de alimentos

Los agricultores tachan de "locura legislativa" la Ley de Restauración de la Naturaleza y piden que se "tumbe"

A días de que Medio Ambiente tome una decisión final sobre la Ley de Restauración de la Naturaleza, agricultores y pescadores solicitan a los partidos políticos que "tumben" la normativa.
Los agricultores tachan de "locura legislativa" la Ley de Restauración de la Naturaleza y piden que sea "tumbada"
Los agricultores tachan de "locura legislativa" la Ley de Restauración de la Naturaleza y piden que sea "tumbada"
Los agricultores tachan de "locura legislativa" la Ley de Restauración de la Naturaleza y piden que se "tumbe"

La Comisión Europea propuso el año pasado una Ley de Restauración de la Naturaleza, con la que se introducen una serie de objetivos y obligaciones para los Estados miembros e, indirectamente, sobre los sectores de productores de alimentos. Ahora, a dos días de que la Comisión de Seguridad Alimentaria, Salud Pública y Medio Ambiente (ENVI) vuelva a votar esta normativa, tanto agricultores como pescadores han denunciado públicamente que se trata de “una locura legislativa que pone en peligro sus medios de vida y la producción de alimentos en la Unión Europea”.

Según señalaron las grandes organizaciones agrícolas COPA y COGECA, cuyas palabras han sido suscritas por la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), “una buena Ley de Restauración de la Naturaleza no puede diseñarse sin el claro compromiso de los agricultores y pescadorespor lo que pide a los partidos que sea "tumbada".

Según denunció el presidente de Asaja Valencia, Cristóbal Aguado, “con leyes insultantes como estas, Bruselas está anteponiendo los intereses comerciales de unos pocos sobre la autosuficiente alimentaria europea”.

Se trata de otra ley que viene de Europa 

El 22 de junio de 2022, la Comisión Europea presentó la Propuesta de Reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo sobre la Restauración de la Naturaleza con la finalidad de “recuperar los ecosistemas degradados” en toda la Unión Europea y, en particular, “aquellos que tienen mayor potencial para capturar y almacenar carbono”.

Según explicó el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, se establece como objetivo global que los Estados miembros deberán poner en marcha medidas de restauración que, en conjunto, cubran, para 2023, al menos el 20% de las zonas terrestres y marítimas de la Unión Europea y, para 2050, todos los ecosistemas que necesiten restauración.

Asimismo, se establecen una serie de objetivos específicos para la restauración, entre otros, de ecosistemas terrestres; ecosistemas marinos; conectividad de ríos y de las funciones naturales de las llanuras de inundación; ecosistemas agrícolas, y ecosistemas forestales.

Desde asociaciones como la Fundación Global Nature se ha defendido la postura de que la Ley de Restauración de la Naturaleza “es imprescindible”, alegando que la ley “propone un cambio sin precedentes en nuestra relación con el campo e implica que quien destruya pague y esté obligado a restaurar, con una consecuente reforma de políticas que incentivan la destrucción de la naturaleza”.

“Es una legislación mal pensada, poco realista e inaplicable”

Sin embargo, tanto agricultores como pescadores han mostrado su preocupación en las últimas semanas, ante la llegada inminente de la fecha en la que la Comisión de Medio Ambiente (ENVI) del Parlamento Europeo votará y tomará una decisión final, algo que ocurrirá el próximo 15 de junio.

Los miembros del Parlamento Europeo que dijeron sí a la restauración de la naturaleza, explicaron desde Asaja, no aceptaron “una legislación mal pensada, poco realista e inaplicable que pone en peligro los medios de vida y la producción de alimentos de los agricultores y pescadores en la Unión Europea”.

A falta de pocos días para que ENVI tome la decisión sobre el expediente, desde la organización europea que agrupa las cooperativas y entidades agrarias, COPA-COGECA, y el cuerpo de representación de los pescadores de la Unión Europea, Europêche, solicitaron al comité de ENVI “que escuche y respete las preocupaciones de las comunidades de agricultores y pescadores”, pidiendo a la Comisión “que reanude el proceso desde cero”.

Según señaló la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), ambos sectores “se han enfrentado, no solo a desafíos globales como el Covid, la crisis energética o la guerra en Ucrania, sino también a políticas ambientales radicales de la Unión Europea que están afectando profundamente la producción de alimentos y la soberanía alimentaria de la Unión Europea”.

Según señalaron desde COPA-COGECA, “una buena Ley de Restauración de la Naturaleza no puede diseñarse sin el claro compromiso de los agricultores y pescadores”. Por tanto, añadieron, “en lugar de amenazas y acuerdos encubiertos, la Comisión Europea debería volver a la mesa de dibujo. Las autoridades de la UE deben respetar y reconocer que quienes implementarán esta ley no la consideran factible, viable ni implementable”.

Por su parte, el presidente de Europêche, Javier Garat, denunció que la Comisión “ha creado un debate polarizado” en torno a la ley, y aseguró que “las ONG han politizado y simplificado el debate enumerando a los eurodiputados a favor o en contra de la naturaleza”. Sin embargo, para Europêche, debe intentarse “compatibilizar la protección del medio ambiente con la actividad humana” y, en particular, con “la tan necesaria” producción de alimentos. “Ya estamos importando el 70% de los productos del mar que consumimos en Europa. La nueva Ley, sin duda, contribuirá a aumentar la brecha de seguridad alimentaria”, sentenció.

Asaja pide a los políticos que la ley sea tumbada y sea consensuada con el sector agrario

Desde la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) mostraron su apoyo y comprensión hacia la ola de indignación de los agricultores y pescadores europeos, solicitando a los partidos políticos “que alguna vez han sentido sensibilidad hacia la agricultura” que tumben “la locura legislativa que supone la Ley de Restauración de la Naturaleza” para, posteriormente, “establecer una mesa de diálogo y un consenso con el sector agrario”.

Según señaló el presidente de Asaja Valencia, Cristóbal Aguado, “bajo el falso debate sobre la protección del medioambiente en Europa, realmente lo que se está haciendo, de manera descarada e intencionada, es buscar la reducción de la producción agraria, para beneficiar las exportaciones de bienes industriales, tecnológicos y de servicios de algunos países europeos y, al mismo tiempo, para beneficiar a otros países europeos no productores que así se enriquecen distribuyendo los alimentos que importan de países terceros. Ya está bien de engañar a la gente. Con leyes insultantes como estas, Bruselas está anteponiendo los intereses comerciales de unos pocos sobre la autosuficiente alimentaria europea”. 

De acuerdo con la información facilitada por Asaja, en España supondría que alrededor del 40% de la superficie que está bajo la “Red Natura 2000” quedaría improductiva debido a que no permitiría la misma actividad agrícola como hasta ahora, “a pesar de cumplir ya con numerosos condicionantes como son las Zonas Especiales de Conservación (ZEC) así como de Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA)”.