¿Los autónomos pueden cobrar su pensión u otras prestaciones si residen fuera de España?

Al llegar la jubilación, muchos autónomos se plantean cambiar de residencia e incluso mudarse al extranjero, otros, por el contario, ya residen fuera de España y pueden necesitar la prestación por maternidad o la baja por enfermedad. En muchos casos, surge la duda de si pueden cobrar su pensión u otras prestaciones en otros países fuera de España. La Seguridad Social permite a los trabajadores por cuenta propia cobrar su pensión contributiva y la incapacidad permanente. Sin embargo, otras como el cese de actividad o muchas de las prestaciones que disfrutan los autónomos residentes en España no podrán percibirse fuera de nuestras fronteras.

Si un autónomo reside en otro país y sigue en activo, podrá disfrutar de prestaciones familiares, por enfermedad, accidente de trabajo o enfermedad profesional pero, para ello, deberá afiliarse a la Seguridad Social del país en cuestión. Aunque, lo normal es que las mismas ventajas que disfrutan los autónomos españoles no existan en otros estados. España es el único país de la UE en que los autónomos gozan de las mismas prestaciones que un asalariado, fuera de nuestras fronteras no están generalizadas prestaciones como la maternidad o la lactancia. Otra cosa es que las contrate en el sector privado.

Dentro de la Unión Europea, si un trabajador por cuenta propia decide - por ejemplo - ejercer su profesión en Alemania y quiere obtener la baja, beberá solicitarla a la Seguridad Social alemana, no de la española.

Otra cuestión es el caso de un autónomo que ha cotizado toda su vida en España y decide retirarse en el extranjero. Este trabajador por cuenta propia podrá disfrutar de su pensión contributiva en cualquier lugar del mundo al igual que su prestación por incapacidad permanente. 

“La Seguridad Social permite a los autónomos cobrar las mensualidades de una pensión contributiva fuera de España si el beneficiario se va a vivir de forma indefinida a otro estado”, afirmó Jorge Campmany, abogado laboralista y experto en la Seguridad Social. Sin embargo, explicó el letrado, “no todas las prestaciones se pueden percibir en el extranjero”.

Los trabajadores por cuenta propia sólo podrán ingresar su pensión contributiva – sin complemento a mínimos – y la incapacidad permanente fuera de España. “Hay muchos autónomos que sólo pudieron cotizar sus últimos 15 años de vida laboral para obtener el derecho a la pensión de jubilación. Cuando su base reguladora es inferior a la pensión mínima estatal, cobran el complemento a mínimos”.

Sin embargo, este complemento económico adicional, “no puede cobrarse en el extranjero”. Si la base reguladora de un autónomo es de 400 euros, el Estado complementaría su prestación hasta alcanzar la pensión mínima. “En el extranjero – como recoge el artículo 59.1 de la Seguridad Social – no se puede percibir el complemento a mínimos, es un requisito residir en territorio español”, agregó el socio director de Campmany Abogados.

De esta forma, los afiliados al RETA sólo percibirán su pensión contributiva sin complemento a mínimos en el extranjero: aquella que fue financiada a través de sus cotizaciones a la Seguridad Social y que le facilita una renta mensual tras concluir su actividad. También podrán cobrar su pensión por incapacidad permanente, que es aquella que reconoce que un trabajador por cuenta propia está inhabilitado por enfermedad o dolencias para poder continuar con su actividad.

¿Cómo puede un autónomo cobrar su pensión o incapacidad permanente en el extranjero?

Desde el despacho Campmany Abogados aseguraron que los trabajador por cuenta propia sólo deben cumplir un requisito para cobrar sus pensión contributiva o incapacidad permanente fuera de España: comunicar cada año en la bajada o consulado de España del país extranjero que el beneficiario de la prestación sigue vivo y comunicar a la Seguridad Social el cambio de residencia.

Lo primero que has de hacer un autónomo o cualquier ciudadano para poder seguir disfrutando de tu pensión contributiva más allá del límite territorial español “es comunicarle el cambio al INSS. Entonces la Seguridad Social gestionará esta modificación con tu país de destino”, añadieron desde Campmany Abogados. Una vez resida en dicho país, tendrá que comunicarle a la embajada o consulado español en los tres primeros meses del año de cada año que sigue vivo. 

“Esto se hace porque los registros civiles de todos los países no son iguales que en Europa o España”, matizó Campmany. “No es lo mismo acreditar un fallecimiento en Alemania que en la India. Al final es un trámite para que la Seguridad Social sepa que el autónomo necesita seguir cobrando sus prestación”, especificó el abogado laboralista.

El experto, también matizó que da igual cuál sea el país al que se mude el autónomo. “La prestación por pensión contributiva o incapacidad permanente no se verá modificada por el país de residencia. La cuantía será la misma dentro de la Unión Europea como fuera de ella. Al final la Seguridad Social devuelve lo que le corresponde al autónomo, ni más ni menos”, añadió.

Los autónomos no pueden cobrar el cese de actividad en el extranjero

Hay otras prestaciones, como el cese de actividad, que “por su naturaleza no pueden cobrarse en el extranjero”, concretó Campmany. “Este subsidio se asemeja al desempleo. La idea es que el emprendedor tenga ingresos hasta que pueda rehacer su actividad económica. Por lo que no tiene ningún sentido irse fuera de España y cobrarla”, aseguró el abogado laboralista.

La ley, por el contrario, permite que un autónomo que esté cobrando la prestación por cese de actividad pueda suspender durante 12 meses el subsidio para ir al extranjero. “Este recurso es principalmente usado por autónomos extranjeros que residen en España; que por lo general viajan una vez al año a su país de origen”, explicó Campmany.

Los autónomos tampoco podrán cobrar sus prestaciones no contributivas en el extranjero

Las prestaciones no contributivas son aquellas que se le reconocen a los ciudadanos que no tienen los recursos suficientes para subsistir dignamente dentro de los mínimos establecidos por la ley. Algunos autónomos pueden llegar a cobrar dichas prestaciones porque sus ingresos no son suficientes para vivir. Ejemplo de este tipo de prestaciones pueden ser el Ingreso Mínimo Vital.

Las parejas o cónyuges de los autónomos pueden cobrar la pensión de viudedad en el extranjero

La pensión de viudedad de un autónomo en un subsidio contributivo al que tienen derecho las personas - en determinados casos - que hayan estado casada o que hayan sido parejas de hecho del trabajador por cuenta propia fallecido. Esta prestación – concluyó Campmany – también podrá ser disfrutada en el extranjero.