Estos negocios ingresan de media 175.000 euros, ¿cómo abrir una carnicería?

España necesita carniceros: la falta de relevo generacional provoca el cierre del 30% de los negocios

El 30% de las carnicerías han cerrado en los últimos 10 años. Y no ha sido sólo por la crisis, sino por la falta de jóvenes autónomos que se inicien en esta actividad. La patronal Carnimad echa en falta nuevos profesionales.

España necesita carniceros
España necesita carniceros
España necesita carniceros: la falta de relevo generacional provoca el cierre del 30% de los negocios

En España hacen falta carniceros. Eso es lo que parece según los últimos datos aportados por Carnimad, la asociación más veterana del sector comercial de la carne. Según sus informes, en nuestro país existe una escasez “preocupante” de autónomos charcuteros, polleros, casqueros y carniceros por la falta de relevo generacional. Situación que en los últimos diez años ha conllevado el cierre del 30% de estos negocios de alimentación a pesar de que son comercios que registran una de las menores tasas de desempleo en nuestro país y que son capaces de generar 170.000 euros de ingresos brutos al año.

“Hay que piensa que ser carnicero es filetear carne. Ser emprendedor en este sector significa gestionar un negocio, tratar con proveedores, conocer las normativas de higiene y seguridad alimentaria o gestionar de equipos”, afirmó María Sánchez, directora general de Carnimad y Educarne. Según la organización, más de un 60% de los pequeños negocios del sector están conformados por autónomos que superan los 45 años. “Uno de los condicionantes es que en España no existe formación académica para esta profesión como sí ocurre con otros colectivos como la hostelería. Para ser carnicero en Francia o Alemania, un profesional debe estudiar entre 2 o 3 años. En nuestro país este oficio se ha transmitido de padres a hijos o se ha formado directamente en el propio negocio. Ahora la mayoría de hijos estudian una carrera, por lo que los jóvenes no se platean ser carnicero. Problema al que hay que sumarle la concentración empresarial, dejando sin negocios de alimentación a gran parte de la España Vaciada”, añadió Sánchez.

“Esta falta de profesionales no es comprensible. Un asalariado en este sector – con experiencia y bagaje – puede llegar a cobrar 3.000 euros brutos mensuales. En el caso del propietario, en torno al 75% de los autónomos genera anualmente entre 170.000 y 250.000 euros de ingresos anuales. En los últimos cinco años hemos perdido el 15% de los establecimientos. Actualmente en Madrid hay 2.500 puntos de venta y 28.000 a nivel nacional. Hace diez años eran 34.000 en toda España y 3.300 en la capital. La inmensa mayoría cesaron su actividad por no poder traspasar su negocio”, explicó la directora de Carnimad.

¿Qué necesito para montar una carnicería?

Los primeros pasos para montar una carnicería – como en cualquier otro negocio – es darse de alta como autónomo en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) en el epígrafe (CNAE 4722) de ‘Comercio al por menor de carne y productos cárnicos en establecimientos especializados’.

Requisitos e infraestructuras para montar una carnicería

“Antes de montar una carnicería o charcutería, lo primero que un autónomo que debe plantearse es el emplazamiento. En el caso de que quiera ubicar su negocio en un mercado municipal, la inversión aproximada será de 50.000 euros, pero contará con un espacio menor. Si por el contrario lo que desea es tener su propio local, la adquisición del mismo variará en función del barrio donde quiera posicionarse. Por lo general, la cuantía oscilará entre los 250.000 y 300.000 euros cuando se trate de una tienda a pie de calle. En el caso de que el negocio prospere, el autónomo habrá recuperado la inversión en menos de dos años”, concretó Sánchez.

Desde Carnimad enumeraron los requisitos principales para montar una carnicera:

  • Formación previa
  • Tener u alquilar un local o un puesto en un mercado municipal
  • Adecuar el local a la actividad
  • Darse de alta como autónomo o montar una sociedad
  • Licencia de actividad
  • Registro autonómico del negocio
  • Equipamiento de frío: congeladores, neveras y mostradores climatizados
  • Garantizar la seguridad alimentaria: diseñar las instalaciones para evitar el cruce de especies o productos para que no se contaminen
  • Herramientas: cuchillos, tablas, afiladores, etc
  • Materia prima: buscar proveedores que garanticen el abastecimiento del producto
  • Máquinas de corte y picado de carne
  • Obrador: en el caso de que el carnicero haga productos elaborados
  • Personal

Carnimad y Educarne ofrecen más de 300 puestos de trabajo de carnicero

La directora de Carnimad hizo hincapié en la necesidad de lograr la consolidación de nuevas generaciones que afiancen la continuidad de la profesión y puso en valor que hacen tanto en formación como en la publicación de ofertas de trabajo en su propio portal web.

“Gracias a nuestro portal web - http://www.empleocarniceroscharcuteros.carnimad.es/ - hemos logrado que más de 175 profesionales encuentren trabajo y ofrecen más de 300 puestos de trabajo. Tanto negocios como asalariados pueden solicitar este servicio para buscar empleo o empleados. También hemos incorporado a todos los alumnos que se forman gracias a Educarne. Nosotros les conseguimos las prácticas para que den sus primeros pasos y también les ayudamos a elaborar su currículum. Además, de cara a los negocios, nosotros somos quienes hacemos las entrevistas y seleccionamos a los empleados disponibles para acceder al mercado, garantizando la excelencia profesional del colectivo”, concluyó Sánchez.

Los carniceros se quejan de que los consumidores se están alejando del comercio local tras la pandemia

Las restricciones impuestas por el Gobierno durante la pandemia llegaron a beneficiar a los pequeños comercios locales. Carnicerías, pescaderías o fruterías recibieron un impacto inusual de clientes. “Durante la crisis sanitaria los consumidores se acercaron especialmente a nuestros locales. La gente pasaba más tiempo en casa y la hostelería o espacios públicos aún generaban bastante seguridad. En ese periodo experimentamos un crecimiento inaudito. En especial de rangos de edad que no solían comprar en carnicerías o comercio de proximidad en las que hubo un aumento de ventas en torno al 14%”, recordó la directora de Carnimad.

“Dieron más de lo que pudieron. La mayoría de las carnicerías son empresas familiares y si alguno caía enfermo peligraba la continuidad del negocio. Y ahora las cifras de ventas están volviendo a los niveles previos a la pandemia. Da muchísima lástima, porque los consumidores creen que los negocios locales son más caros que las grandes superficies o ya no tienen tiempo para acercarse a lo locales”, añadió Sánchez.

“Los costes de nuestros negocios están disparados. La mala situación de los ganaderos, la inflación y las consecuencias de esta crisis preocupan bastante al sector. Estamos intentando contener nuestros precios lo máximo posible, pero es inevitable ir en contra del mercado”, concluyó Sánchez.