Los agricultores reclaman a las cadenas de distribución y al Gobierno que defiendan la fresa de Huelva

En los últimos días, los agricultores de Huelva, según dicen, están siendo víctimas de una campaña de boicot contra la producción de fresa de la provincia. Así lo aseguraron a este medio desde la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), explicando que los productores alemanes podrían estar detrás de la plataforma ecologista que está acusándoles de no cumplir con los requisitos medioambientales en sus cultivos.

Además, desde la asociación agraria reclamaron al Gobierno que defienda el producto español, algo que no estarían haciendo facilitando que un grupo de diputados alemanes pretendiera viajar a Huelva durante el día de ayer para vigilar las condiciones en las que trabajan los agricultores de la provincia. Finalmente, estos políticos no concretaron la visita argumentando que el asunto es “de relevancia política” en España, en el contexto del adelanto electoral.

En la misma línea se pronunció hace unos días Antonio Garamendi, presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), en el marco de la asamblea ordinaria de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA). “Cuando hablamos de sostenibilidad, también tenemos que tener presente la economía para que todo fluya. Nosotros queremos trabajar por esta sostenibilidad, pero no podemos compartir en ningún caso una campaña de descrédito contra muchos autónomos y pequeños negocios”, afirmó.

En este contexto, cabe recordar que la fresa berry de Huelva constituye el 98% de la producción de este cultivo en España, y representa el 30% de la UE. “Esto conlleva un importante impulso económico no sólo para los agricultores del sector, sino también para toda la región. El cultivo de la fresa y los frutos rojos representa el 11,35% del PIB de la provincia de Huelva y da trabajo de manera directa a 100.000 personas y asciende a 160.000 con empleos indirectos”, recordaron desde la Asociación Interprofesional de la Fresa Andaluza (Interfresa)

Ante esta situación, desde Asaja reclamaron un mayor apoyo por parte del Gobierno, pero también de las grandes distribuidoras, que son quienes imponen a los agricultores las certificaciones y requisitos de sostenibilidad para producir bienes como, en este caso, la fresa.

Los agricultores creen que los productores alemanes están detrás del boicot a la fresa de Huelva

En este contexto, aunque no pueden confirmarlo, los agricultores sospechan que son los productores alemanes quienes están detrás de la plataforma ecologista que está instando a los supermercados del país a no comprar fresas producidas en la provincia española.

“Intuimos que son ataques interesados a nuestra fruta, porque siempre coinciden cuando nuestras frutas entran en competencia con las de otros países. Por ejemplo, Alemania está entrando ahora en producción con su fresa”, afirmó, en este sentido, Félix Sanz, secretario general de Asaja en Huelva.

Félix Sanz recordó que este intento de boicot a la fresa española ha venido ocurriendo en numerosas ocasiones durante los últimos años por parte de otros productores vecinos, como ocurrió en el caso de Francia. “Hasta que se dieron cuenta de que atacar a la fresa española iba en detrimento de la suya propia en los mercados y dejaron de hacerlo. Es curioso, pero desde hace años ya no se ataca a la fresa de Huelva desde Francia”, explicó.

A pesar de que la plataforma ecologista alemana lleva semanas presionando para que los supermercados alemanes, como Aldi o Lidl, dejen de comprar la fresa que se produce en la provincia de Huelva, desde Asaja reconocieron que su campaña no se ha visto comprometida, y que el conflicto se está convirtiendo en “ruido político y mediático”, en un contexto de precampaña electoral.

Los agricultores de Huelva piden a las distribuidoras y a las administraciones que les defiendan ante el boicot alemán

Por otro lado, los agricultores onubenses están echando en falta el apoyo de las administraciones y de las propias cadenas de supermercados en su lucha. Según consideran, son estos dos estamentos quienes fijan las condiciones de sostenibilidad y los mecanismos de control que garantizan que las fresas se producen con unas garantías de calidad.

“Las cadenas de supermercados debían hacérselo mirar, porque son ellas las que exigen las normas de venta y las certificaciones. Los productores las tienen porque son exigencias de la distribución. Por lo tanto, no están perjudicando a los agricultores, sino a ellas también, y deberían salir a decir que no es cierto porque ellos lo auditan mediante las certificaciones impuestas por ellos”, explicó Félix Sanz.

El secretario general de Asaja Huelva consideró que el boicot alemán a la fresa española está siendo “avalado y amparado por el Gobierno, que tendría que estar defendiendo los intereses de sus producciones. Sin embargo, han permitido que venga a vigilarnos un grupo de diputados de un país extranjero, no se sabe muy bien por qué, que ni siquiera han concertado una reunión con los agricultores en ningún momento.”

Tal y como afirmaron los agricultores, son las propias administraciones quienes deciden los criterios y mecanismos de control para que la producción de sus cultivos cumpla con los estándares de protección del medioambiente. “Estamos en un país de leyes, tenemos leyes casi para todo. Es muy difícil incumplir la ley, porque la administración impone muchos controles que funcionan. No sólo en aspectos medioambientales, también laborales y administrativos”, recordaron.

Según explican, la sequía que ha afectado al campo español durante los últimos meses ha provocado que los agricultores tuvieran que recurrir a las reservas hídricas de la provincia, pero siempre dentro de los límites que impone la legislación. “Llevamos arrastrando una situación de sequía que perjudica las producciones. Sin embargo, nosotros lo hacemos todo según la regulación. Si llueve menos, ajustamos el regadío a la cantidad de agua que existe”, explicó a este diario Félix Sanz.

Ante esta situación, el secretario general de Asaja Huelva concluyó con un mensaje de tranquilidad para los productores de fresa onubense. “Estamos perdiendo el tiempo que deberíamos estar invirtiendo en producir de una manera mucho más adecuada, para que nuestro producto siga siendo el mejor. Deben estar tranquilos y seguir funcionando de una manera normal, como lo hemos venido haciendo durante años, y seguir trabajando para que sea así”, afirmó.