La pensión media de jubilación de los autónomos es 600 euros inferior a la de los asalariados

Los autónomos cobran 42 euros más de pensión de jubilación que hace un año. La pensión medida de los trabajadores por cuenta propia ha pasado de ser 794,1 euros/mes en agosto de 2021, a 836,1 euros/mes en agosto de 2022, según los datos que publica el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. No obstante, y pesar de la leve mejora, la pensión de jubilación que cobran la mayoría de los profesionales por cuenta propia está muy lejos aún de la pensión media que se percibe los asalariados del Régimen General que se situó, en agosto de 2022, en 1.404,4 euros al mes.

Estamos hablando de una diferencia de casi 600 euros mensuales entre la pensión medida que cobra un trabajador del Régimen General y la que cobra uno del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Pero quizá, lo más importante es que el promedio de los jubilados autónomos apenas si disponen de 850 euros al mes para vivir, salvo aquellos que obtengan rentas complementarias que no son la mayoría  El empobrecimiento de los jubilados autónomos, más aún cuando la inflación parece que va a durar bastante tiempo, es algo que pretende corregir la reforma de las cuotas de los autónomos, que acaba de ser convalidada por el Congreso de los Diputados y que permitirá al colectivo cotizar en función de sus ingresos. Según dijo el ministro de Inclusión, Seguridad Socual y Migraciones, José Luis Escrivá, durante su defensa de la norma en la Cámara Baja, la nueva cotización por ingresos reales permitirá que “las prestaciones se alineen con el esfuerzo contributivo que haga el autónomo, mejorando así la acción protectora de la Seguridad Social sobre el colectivo”.

Escrivá confía en que el nuevo sistema de cotización por tramos permita a los autónomos adaptar el pago de su cuota a la Seguridad Social al funcionamiento de sus negocios. De tal manera que cuando tengan ingresos reales bajos, paguen una menor cuota. Pero que cuando obtengan rendimientos altos, puedan elevar su cotización, para conseguir tener mejores prestaciones, como la de jubilación.

Esto es lo que cobran los autónomos jubilados en cada CCAA

Los datos publicados por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones son desagrados por autonomías. Por lo que se puede saber cuál es la pensión medida que están cobrando los autónomos en las diferentes comunidades autónomas. Si bien, los últimos datos publicados por regiones hacen referencia a julio de 2022.

• La pensión medida de un autónomo en Andalucía es de: 808,36 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Aragón es de: 881,53 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Asturias es de: 823,54 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en las Islas Baleares es de: 787,17euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Canarias es de: 762,31 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Cantabria es de: 816,74 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Castilla y León es de: 804,61 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Castilla-La Mancha es de: 820,38 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Cataluña es de: 878,88 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en la Comunidad Valenciana es de: 842,97 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Extremadura es de: 774,01euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Galicia es de: 718,47 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Madrid es de: 911,33 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Murcia es de: 834,06 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Navarra es de: 948,46 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en País Vasco es de: 995,72 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en La Rioja es de: 867,73 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Ceuta es de: 889,54 euros/mes.
• La pensión medida de un autónomo en Melilla es de: 830,68euros/mes.

Los autónomos reciben durante su jubilación el doble de lo que aportaron al sistema

Las dificultades para iniciar una actividad por cuenta propia, la inestabilidad económica del país, la falta de conocimiento sobre sus prestaciones y lo que ofrece la Seguridad Social son algunos de los principales factores que han impedido a los autónomos cotizar más y por bases superiores. Una mala praxis que se ha producido durante muchos años y que tiene como resultado el evidente decalaje evidente entre la pensión media de un asalariado y la de un autónomo. Pese a ello, el sistema público de pensiones le sigue saliendo rentable al autónomo, ya que consigue cobrar el doble de lo que aportó. 

Desde la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) siempre han defendido la importancia de cotizar y ejemplificaba los resultados positivos de hacerlo con el siguiente cálculo. Este consiste en multiplicar, primero, los años durante los que pagarán su cuota la mayoría de autónomos. Si se toma la base mínima, un trabajador por cuenta propia tendría que cotizar 35 años. Basta con multiplicar los 294 euros de cuota mínima mensual, por los 12 meses que tiene cada año, y por 35 años para saber que este autónomo aportará al sistema alrededor de 123.480 euros durante toda su vida laboral.

Por otro lado, y dado que la esperanza de vida son 84 años, éste trabajador podría disfrutar de una pensión de 960,6 euros mensuales, con 14 pagas anuales y durante 18 años. Esto deja como resultado un ingreso de 242.071 euros. Es decir, un autónomo que cotiza por la mínima cobraría de pensión (242.070 euros) el doble de lo que ha aportado (123.480 euros). Ningún plan de pensiones privado, a día de hoy, ofrece este retorno. Sin contar, además, que estos productos tampoco son vitalicios.

La jubilación es un buen ejemplo de la incidencia que tiene aumentar la base en las prestaciones del autónomo. Tal y como vienen explicando expertos y organizaciones desde hace años, los avances en el sistema de prestaciones han hecho que, a día de hoy, aumentar la base de cotización sea una inversión y no un gasto. Es más, una de las mejores inversiones con las que se puede encontrar el autónomo, ya que dan retornos de más del doble de lo aportado y cubren al trabajador durante el resto de su vida.