A pesar de la moratoria que protege a los pequeños negocios

El número de autónomos obligados por la crisis a acudir a concurso de acreedores no ha parado de crecer desde 2020

Desde finales de 2020, el número de concursos de acreedores convocados por autónomos no ha dejado de crecer, según las estadísticas del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). A pesar de que hay una moratoria que protege a los pequeños negocios. 

Los autónomos llevan 21 meses abriendo concursos de acreedores
El número de concursos presentados por autónomos lleva 21 meses seguidos en alza.
El número de autónomos obligados por la crisis a acudir a concurso de acreedores no ha parado de crecer desde 2020

Los autónomos no han dejado de convocar concursos de acreedores desde finales de 2020. Un incremento consecutivo en el número de procedimientos iniciados por los pequeños negocios que sorprende a los expertos, dado que los autónomos están protegidos actualmente y hasta el próximo 30 de junio por una moratoria concursal, que les permite no tener que alertar sobre su nivel de insolvencia. Aun así, y según los últimos datos publicados por el Consejo General del Poder judicial (CGPJ), el número de concursos presentados por profesionales por cuenta propia lleva 21 meses seguidos en alza.

Las últimas cifras que ha hecho públicas el CGPJ ponen de manifiesto que son los autónomos persona física quiénes están principalmente incrementando las estadísticas de los procesos concursales en España. De hecho, durante el primer trimestre de 2022 se ha elevado un 29,5% con respecto al año anterior el número de concursos abiertos por trabajadores por cuenta propia. Estos son más de 1.080 concursos de acreedores de autónomos en apenas en tres meses.

Se trata de unas cifras que sobresalen si se comparan con la caída que sufrió el número de procesos puestos en marcha por las personas jurídicas. Que fueron un 9% menos que en el mismo trimestre de 2021. Y también con el aumento de concursos de personas físicas no empresarias (un 11,1% más con respecto al ejercicio anterior).

El temor a la futura reforma concursal

El fuerte incremento en el número de concursos abiertos por parte de las personas físicas, bien sean empresarios o no, en los últimos años responde al “temor” por la futura reforma concursal que está elaborando en estos momentos el Gobierno. El experto y técnico del Registro de Economistas Forenses (REFOR), dependiente del Consejo General de Economistas, Alberto Velasco, explicó que tanto los autónomos, como el resto de ciudadanos están presentando concursos “para poder acceder a una condonación del crédito público a través de la segunda oportunidad. Es decir, están buscando liberarse de las deudas contraídas con Hacienda y Seguridad Social”.

Según Velasco, desde finales de 2019 y a raíz de una doctrina publicada por el Tribunal Supremo, los trabajadores por cuenta propia están pudiendo acceder a condonaciones de la deuda que han adquirido con la Administración. Una opción que el Gobierno quiere limitar con el proyecto de Ley de la reforma concursal. “Esto es una lucha interna entre los magistrados del poder judicial que permiten la condonación de las deudas y el Ejecutivo que quiere limitarla” apuntó el experto.

La documento de reforma, al que ha tenido acceso este diario digital, recoge la voluntad del Ejecutivo de limitar a 2.000 euros el importe total de condonación. De los que 1.000 euros serían para las deudas contraídas con Seguridad Social y otros 1.000 euros para las que se tengan con Hacienda. Los expertos en materia concursal catalogan estos importes de “irrisorios”, especialmente cuando se están consiguiendo sentencias con exoneraciones de crédito público por valores mucho mayores.

Esta limitación de las exoneraciones de deuda pública es lo que estaría animando "a los autónomos persona física, y al resto de ciudadanos, con deudas de crédito público muy altas a acudir al concurso de acreedores, a pesar de tener aún en vigor la moratoria concursal. Dado que esta es la única vía que les queda para librarse de pagar antes de que se apruebe la normativa” apuntó Alberto Velasco.

Una moratoria concursal que acaba el 30 de junio

Independientemente del “temor” a que la futura ley concursal pueda no ser tan benévola con las deudas que contraen los autónomos con la Administración, lo que tanto este experto, como el resto de profesionales del sector apunta es a la oleada de concursos de acreedores de trabajadores por cuenta propia que se va a producir a finales de mes cuando acabe la moratoria concursal.

Durante la pandemia, el Gobierno aprobó como salvavidas a la presión económica y la falta de liquidez que muchos negocios sufrían -y siguen sufriendo- una moratoria concursal. De esta forma, los dueños de negocios en situación de insolvencia quedaron exentos de tener que solicitar la apertura de un concurso de acreedores cuando no pudieran hacer frente a sus obligaciones de pago; y además se prohibió que se admitieran a juicio los requerimientos de concursos que presentasen sus acreedores. Una medida que aprobó el Gobierno en 2020, que se ha ido extendiendo durante los últimos años y que tiene fecha de caducidad el próximo 30 de junio. 

La última prórroga de la moratoria concursal para autónomos podría suponer el cierre de miles de pequeños negocios, que están utilizando esta medida para no comunicar aún sus problemas de insolvencia. De hecho, uno de los aspectos en el que la mayoría de los expertos en materia concursal y Ley de Segunda Oportunidad coinciden es en la avalancha de procedimientos que se van a abrir cuando finalice la moratoria.

El calendario del Gobierno para conseguir la reforma Concursal

El fin de la moratoria concursal podría coincidir con la aprobación de la reforma concursal en la que lleva meses trabajando el Ejecutivo. Si bien, la primera acaba el 30 de junio; la segunda debería estar lista para el próximo 27 de junio.

Esto se debe a que la reforma de la Ley concursal es un texto normativo que debería cumplir con la transposición de la Directiva Europea 2019/1023 sobre Insolvencia empresarial y España tiene el compromiso con Europa de tener listo antes del próximo 27 de julio.

Para el mundillo concursal es un interrogante si el Gobierno va a conseguir cumplir con ambos plazos, o si, por el contrario, va a tener que tomar nuevas medidas, como la aprobación de una nueva prórroga de la moratoria concursal para tratar de contener a los negocios con dificultades hasta tener el texto aprobado. En cuyo caso, también debería declarar julio como mes hábil en términos parlamentarios. 

En cualquier caso, los plazos que tiene el Gobierno sobre la mesa para sacar adelante la reforma concursal, y que confirman fuentes del Congreso, serían los siguientes: 

  • Semana del 6 al 12 de junio: se han convocado dos sesiones para examinar el Proyecto de Ley de Reforma de la Ley Concursal tras el proceso de enmiendas. Hay que decir que entre los expertos consultados, y los diferentes grupos parlamentarios se presentaron más de 607 enmiendas al texto.
  • Semana del 13 al 19 de junio: se tiene previsto que sea entre estos días cuando la Comisión de Justicia vote la normativa y de su visto bueno.
  • Semana del 20 al 26 de junio: que se debate el texto en el Pleno del Congreso antes de ser llevado a aprobación final, cuatro días antes de que termine la moratoria concursal.