Ante las críticas de los agricultores por el Cuaderno Digital Agrícola, el ministerio publica aclaraciones
Ante la incertidumbre generada por el Cuaderno Digital de Explotación Agrícola que se les exige a los agricultores, el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) ha publicado una nota aclaratoria sobre su entrada en vigor y las claves del Real Decreto-ley.
Si bien la Unión Europea contempla la llegada del Cuaderno Digital de Explotación Agrícola de cara a 2026, el Gobierno de España ha decidido ser el primer país en imponerlo. El próximo 1 de septiembre es la fecha señalada en la que entrará en vigor para determinadas explotaciones, algo que ha generado descontento e incertidumbre entre los agricultores españoles. Ante esta situación, el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, ha publicado una nota aclaratoria en la que explica las claves del Real Decreto-ley.
“Teniendo en cuenta las recientes modificaciones en relación a la entrada en vigor del Cuaderno digital de explotación agrícola mediante el Real Decreto-ley 4/2023, se ha considerado adecuado redactar el presente documento con objeto de facilitar la comprensión de la norma”, explicaron desde el FEGA.
Desde la Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja), que lleva meses solicitando al Gobierno que recapacite y paralice la entrada en vigor del cuaderno digital, han vuelto a solicitar que se deje en suspenso esta obligatoriedad. En palabras de la asociación, “El Gobierno adelanta el cuaderno digital sin establecer un plan de formación a los agricultores, sin especificar ningún apoyo a aquellos que no tienen medios digitales y sin aclarar que habrá organismos públicos y gratuitos que tramiten adecuadamente el cuaderno digital a las personas interesadas”.
La entrada en vigor variará según el tamaño de las explotaciones
El artículo 16 del Real Decreto-ley 4/20231 establece una entrada en vigor progresiva del Cuaderno digital de Explotación Agrícola (CUE) en cuatro fases. Dichas fases, explica la nota aclaratoria elaborada por el FEGA, “se establecen en base a dos criterios: el tamaño e intensificación de las explotaciones y el tipo de información a cumplimentar”.
En lo que respecta al tipo de información que se debe cumplimentar, ésta se distinguirá entre la que corresponde a la Política Agraria Común (PAC) y entre el resto de información establecida en el Real Decreto 1054/2022 y en la Orden APA/204/2023 (tratamientos fitosanitarios y fertilización, incluyendo los aspectos relativos al plan de abonado).
En lo que respecta al tamaño e intensificación de la explotación, algo de lo que dependerán las fechas de comienzo de la obligatoriedad, las explotaciones se clasifican como grandes o pequeñas. Las grandes son aquellas explotaciones que cumplan alguna de las siguientes condiciones. El resto de las explotaciones serán consideradas como pequeñas.
- Que superen alguna de las dimensiones máximas (30 hectáreas de tierra de cultivo; 30 hectáreas de pastos permanentes; o 10 hectáreas de cultivos permanente)
- Que, sobre el total de su superficie agraria, tengan más de cinco hectáreas de regadío
- Que dispongan de alguna parcela de invernadero
El cuaderno digital se implementará en cuatro fechas, según la explotación
El Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) explica en su nota aclaratoria que, según recoge el Real Decreto-ley 4/2023, se establecen cuatro fechas de entrada en vigor “en función de los criterios descritos en los anteriores apartados”.
Para las explotaciones grandes se establecen dos fechas: el 1 de septiembre de 2023 y el 1 de enero de 2024. Por su parte, para las explotaciones pequeñas, las fechas establecidas para la implementación obligatoria del cuaderno digital son el 1 de septiembre de 2024 y el 1 de enero de 2025. .
- 1 de septiembre de 2023 (grandes explotaciones): esta fecha coincide con el comienzo de la campaña agrícola de la PAC 2024. A partir de esa fecha, el titular de explotación “sólo deberá anotar en el cuaderno digital la información exigida para las ayudas de la PAC, y únicamente la relativa a la campaña 2024”. Así, recoge la normativa, sólo tendrá que realizar las anotaciones de los siguientes ecorregímenes, en caso de que los solicite: tierras de cultivo de regadío y cultivos leñosos.
- 1 de enero de 2024 (grandes explotaciones): a partir de esa fecha, se deberá cumplimentar el resto de información establecida en la normativa (tratamientos fitosanitarios, resto de información exigida para las ayudas de la PAC y aplicación de fertilizantes, incluyendo fertiirrigación).
- 1 de septiembre de 2024 (pequeñas explotaciones): esta fecha coincide con el comienzo de la campaña agrícola de la PAC 2025. A partir de esa fecha, el titular de explotación “sólo deberá anotar en el cuaderno digital la información exigida para las ayudas de la PAC, y únicamente la relativa a la campaña 2025”. Así, sólo tendrá que realizar las anotaciones de los siguientes ecorregímenes, en caso de que los solicite: tierras de cultivo de regadío y cultivos leñosos.
- 1 de enero de 2025 (pequeñas explotaciones): a partir de esa fecha, se deberá cumplimentar el resto de información establecida en la normativa (tratamientos fitosanitarios, resto de información exigida para las ayudas de la PAC y aplicación de fertilizantes, incluyendo fertirrigación).
“De forma general se puede considerar que la entrada en vigor de las obligaciones de realizar anotaciones en el cuaderno digital se retrasa hasta el 1 de enero de 2024 en las explotaciones grandes y hasta el 1 de enero de 2025 en las explotaciones pequeñas. Únicamente en casos muy puntuales donde dichas anotaciones sean relevantes para comprobar el cumplimiento de determinados ayudas de la PAC de la campaña 2024 o 2025, dichas obligaciones se adelantan al 1 de septiembre de 2023 y al 1 de septiembre de 2024 respectivamente", recoge la nota aclaratoria del FEGA.
El Ministerio aclara la exigencia de disponer de un plan de abonado
Otra de las cuestiones que el FEGA aborda en su nota es lo relativo a la exigencia de disponer de un plan de abonado, algo que, asegura, “también va a depender de la tipología de la explotación y de las ayudas solicitadas”.
“En primer lugar, cabe recordar que, ya desde la campaña 2023, todos los beneficiarios de los ecorregímenes que incluyen entre sus requisitos de subvencionabilidad una gestión sostenible de insumos, tanto explotaciones grandes como pequeñas, deben contar con un plan de abonado”; recoge el documento oficial.
En el resto de los casos, advierte el FEGA, la obligación de disponer de un plan de abonado comienza el 1 de septiembre de 2024, “salvo las explotaciones que no superen las 10 hectáreas, siempre que
sean de secano o que estén dedicadas únicamente a pastos o cultivos forrajeros para autoconsumo, que están exceptuadas de esta obligación”.
Los agricultores piden al Gobierno que deje en suspenso el cuaderno de campo digital
Desde la Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja) llevan meses solicitando al Gobierno que no les obligue a llevar el cuaderno de campo digital. A escasos meses de su entrada en vigor, la organización agraria argumento que el sector “ya está cumplimentando un cuaderno de explotación y está de acuerdo con ir hacia la digitalización, pero decretar un cuaderno digital con tanta precipitación significa un cambio profundo en la manera de trabajar la parte administrativa, ante la cual una gran cantidad de productores no están en absoluto preparados por los desconocimientos informáticos y por los importantes sobrecostes económicos que recrudecen la crisis de rentabilidad”.
Desde Asaja Córdoba criticaron que en un sector donde la edad media de los titulares supera los 64 años, “el Gobierno adelanta el cuaderno digital sin establecer un plan de formación a los agricultores, sin especificar ningún apoyo a aquellos que no tienen medios digitales y sin aclarar que habrá organismos públicos y gratuitos que tramiten adecuadamente el cuaderno digital a las personas interesadas”.
En cuanto a los sobrecostes económicos, fuentes de Asaja advirtieron de que muchos productores “ya tienen bastante con cultivar sus campos y sobrevivir a duras penas para, ahora, pagar además los servicios de administrativos e ingenieros agrónomos”. Por eso, desde la organización agraria reiteraron al Gobierno español que “escuche al sector, atienda las reivindicaciones de las comunidades autónomas y reconduzca este despropósito”.
